El Ayuntamiento de Astorga avanza en la nueva ordenanza que regulará por primera vez la ocupación de la vía pública con mesas, sillas y otros elementos móviles. Los concejales José Luis de la Iglesia y Mar Castro han presentado el borrador, que los hosteleros ya tienen en sus manos ya que se reunieron con ellos este miércoles.
Hasta el momento, la regulación existente en el Ayuntamiento de Astorga en esta materia se concreta en la Ordenanza nº 21 reguladora de las tasas de la ocupación de terrenos de uso público por mesas y sillas con finalidad lucrativa, que entró en vigor en enero de 2011, pero este instrumento normativo “resulta insuficiente en la práctica por lo que era conveniente elaborar otra normativa”.
José Luis de la Iglesia ha señalado que ciudades con similares características a la bimilenaria ya están trabajando en esta ordenanza y ha alegado que es muy necesario contar con este documento: “Los ayuntamientos deben armonizar el derecho de las personas a prestar determinados servicios privados en el espacio público por el inevitable derecho del resto de la ciudadanía a disfrutar de este espacio público sin que se perturbe en su aprovechamiento”.
“Las terrazas deben ser compatibles con otros usos de la vía pública de forma que no limiten la circulación peatonal ni las actividades de los ciudadanos, se instalen con unas condiciones estéticas que no desmerezcan su entorno, su uso no moleste a los vecinos de las viviendas adyacentes y se desarrolle con todas las medidas de seguridad para sus usuarios. El uso privativo del espacio público del espacio público nunca debe prevalecer sobre los derechos de los ciudadanos”.
Cualquier elemento que se sitúe en la vía pública deberá ser registrado y autorizado por el Consistorio, es decir no solo es la ordenanza de terrazas sino que regula cualquier elemento de la vía pública que se quiera poner por parte, por ejemplo, de los comercios.
Características
Para comenzar se ha dividido la ciudad en tres zonas diferenciadas en función del ámbito de protección: entorno monumental (plaza mayor, plaza Eduardo de Castro y plaza de la Catedral), zona amurallada y el resto de la ciudad.
En cada una de estas zonas regirán unas determinaciones en cuanto a las características de los elementos de las terrazas para que estas puedan ser autorizadas, tratando de preservar la belleza y el atractivo de Astorga. El entorno monumental es el más restrictivo.
En la ordenanza, se establecen las condiciones generales de la autorización de terrazas, que deben preservar el tránsito peatonal y la seguridad del tráfico rodado, también se regulan las condiciones de almacenamiento, recogida y retirada de los elementos de la terraza dentro de la vía y en las condiciones de funcionamiento se determina la forma de limpieza, seguridad y ornato de las instalaciones, además del calendario y horario permitido para su explotación.
Se regularán además las condiciones en las que se otorguen licencias, vigencia y renovación que son temporales, de un año, y se establece un nuevo régimen sancionador y una disposición adicional que establece un periodo de 12 meses para que los elementos que, actualmente, forman parte de las terrazas puedan adaptarse a las nuevas características de la presenta ordenanza.
Además, se ha modificado el modelo de solicitud ya que antes era muy genérico y ahora regula todo lo que se puede instalar en las calles, incluso pedirán que se incluyan fotos de los elementos.
“No se regula un modelo específico, solo se establecen los materiales y colores permitidos, no tienen que ser todas las terrazas iguales. Eso sí, todos los elementos que se permiten en la ordenanza deben ser de retirada fácil por lo que, por ejemplo, las carpas no están autorizadas“, señaló Mar Castro.
EL descanso entre jornada y jornada se permite el almacenamiento y recogido en la call pero en días de descanso o vacaciones son puede haber bada en la calle
Respuesta de la hostelería
Mar Castro apostilló que la idea del equipo de gobierno era abordar esta ordenanza al principio de la legislatura pero con la llegada de la pandemia no pudieron hacerlo antes: “Tuvimos que regular las terrazas con todas las limitaciones que había, pero una vez que llegamos a la normalidad empezamos a hablar con los hosteleros antes de verano”.
En cuanto a la opinión de los hosteleros son respecto a esta nueva ordenanza, los concejales señalan que, tras la entrega del borrador este miércoles, aún no saben nada: “Estamos expectantes a la respuesta de los hosteleros, pero aun es pronto. De todas formas, hemos hablado con muchos de ellos y las restricciones se han intentado aplicar ya este verano por lo que lo que no es una sorpresa, al que le afecta lo sabe ya de nuestra mano”.
Ahora queda que la ordenanza pase por un pleno extraordinario (que se llevará a cabo posiblemente a finales de este mes) para una aprobación inicial, luego habrá una exposición pública durante un mes, cuando se pueden realizar alegaciones y posteriormente se llevará a otro pleno.
Consulta la ordenanza de terrazas pinchando aquí.