Elena F. Gordón Un amplio dispositivo policial recorre desde primera hora de esta mañana el entorno de Astorga, dentro de las actuaciones encaminadas a lograr pistas sobre la desaparición de Denis Pikka, la peregrina norteamericana de la que no se tienen noticias desde hace más de cinco meses.
Un convoy con una decena de vehículos de la Policía Nacional trabaja en la capital de la Maragatería y su entorno con un amplio equipo de efectivos. Entre las zonas por las que despliegan los medios técnicos y humanos llegados desde la capital del país se encuentra la localidad de Castrillo de los Polvazares; uno de los pueblos intermedios entre Astorga, donde se perdió el rastro de Denis y El Ganso, a donde pensaba desplazarse el día de su desaparición, según dejó dicho a una amiga a la que envió un correo electrónico.
El denominado paraje de Vallatán de Castrillo de los Polvazares centra esta mañana las labores de los integrantes de los equipos desplazados hasta la provincia, sobre la que eludieron ofrecer detalles desde la Dirección General de la Policía señalando que se informará al respecto únicamente si existen novedades sobre el caso.
Denis Pikka Thiem, de origen chino-americano, perdió contacto con su familia el 4 de abril después de haber comunicado a través de un correo electrónico su intención de acudir a misa en Astorga antes de reanudar su ruta hacia El Ganso un día más tarde. La desaparecida contactó por última vez con su hermano, quien al acceder a su cuenta de correo, pudo comprobar que la actividad más reciente de la mujer tuvo lugar el 4 de abril.
El mensaje decía textualmente: “Hola desde Astorga. Me alegro de que tengas un buen día aunque el clima no haya sido perfecto. Mañana iré a misa de once antes de seguir. Planeo ir a Ganso (en referencia a la cercana localidad de El Ganso). Me han dicho que tienen un albergue decente. Me alegro que Louis esté bien. Vamos hacia arriba. Disfruta, DT”.
Denise estaba en paro y decidió usar sus ahorros para viajar, a lo que era muy aficionada. A mediados de diciembre dejó su casa de Phoenix (Arizona) y comenzó un largo periplo. Visitó diferentes lugares como Manila, Camboya, Singapur y Francia. París fue su último destino antes de viajar a España con la única idea de hacer el Camino de Santiago, que inició sola en Pamplona el 6 de marzo.
El último rastro lo dejó a través del e-mail que envió a una amiga británica, Lisley, a la que conoció en el Camino y con la que había compartido varias semanas de marcha. El mensaje decía textualmente: “Hola desde Astorga. Me alegro de que tengas un buen día aunque el clima no haya sido perfecto. Mañana iré a misa de once antes de seguir. Planeo ir a Ganso (en referencia a la cercana localidad de El Ganso). Me han dicho que tienen un albergue decente. Me alegro que Louis esté bien. Vamos hacia arriba. Disfruta, DT”.
Esa fue la última comunicación, según relató su hermano Cedric a Ical. Desde entonces no se volvió a saber nada de ella, no hubo llamadas, ni correos ni movimientos bancarios y la última vez que sacó dinero de un cajero automático fue el 1 de abril.