La Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) destacó hoy que la buena cosecha de cereales de 2016 no ha compensado un año “decepcionante” en precios y altos costes en los insumos, advirtió de que la sementera actual se presente incluso a pérdidas en determinadas comarcas de secano y alertó de la existencia de plagas de fauna salvaje, principalmente jabalíes, corzos y ciervos, que además de provocar numerosos daños económicos también son una amenaza para la sanidad de la cabaña ganadera. Igualmente, añadió, que el lobo, que se ha convertido en una dificultad “insoportable” con cerca de 2.000 ataques este año.
A ello se suma la crisis láctea del ovino, estabilizado durante las últimas campañas, pero que se ha visto arrastrado por la delicada situación del vacuno, que ahora respira tímidamente.
El coordinador general de UCCL, Jesús Manuel González Palacín, realizó hoy un balance agrario y ganadero del ejercicio que ahora termina y que desgranó por partes. Así, admitió que la cosecha de cereales resultó “generosa y abundante”, pero con precios “ruinosos” que suponen un 40 por ciento menos en relación a la media del último lustro y con costes que registran una subida alcista continua.
En cuanto a ganadería, habló de una crisis “general”, con ligera recuperación del vacuno de leche, que ha visto que han repuntado los precios que se pagaban a 0,18 y 0,19 euros el litro hasta los 0,28 o 0,3, pero con la “mala noticia” de que los que estaban ya en estos abonos, se han mantenido estancados. Ello ha arrastrado a la desaparición de un centenar de activos en 2016 y deja la cifra en el entorno de 1.200. “Es una cantidad insoportable. No podemos seguir bajando”, advirtió. Por su parte, la crisis del ovino se resume en que la “buena salud” de hace dos años se ha visto afectada de tal manera que la leche vale un 30 por ciento menos (pasa de un euro a 0,7 céntimos el litro). En una Comunidad que produce el 70 por ciento de España, las tres patas “deben llegar a acuerdos”, en referencia a productores, industria y administraciones.
En relación con esto, el coordinador de UCCL Valladolid, Valentín García, denunció que al menos una decena de ganaderos que entregan a Quesos Canal, ubicada en Valladolid capital, no encuentran comprador para su producto a partir del 31 de diciembre, fecha en que la firma ha anunciado su cierre.
En el sector extensivo, lamentó que las campañas de saneamiento son “inquisitoriales y desproporcionadas” y dejan a los ganaderos “indefensos”. Por ello, pidió segundas oportunidades en casos positivos y vigilar y controlar la fauna silvestre, “auténtico reservorio” de tuberculosis y brucelosis “según los científicos”. “Es imposible erradicarlas, pero si bajar la prevalencia para que no sea un lastre para las 15.000 explotaciones de Castilla y León”, determinó.
“Desmadre” de la fauna silvestre
En este sentido, definió como “desmadre” el censo de jabalíes, corzos y ciervos, además de para la ganadería, también para la peligrosidad en los accidentes de tráfico. “Necesitamos un control poblacional de las administraciones para bajar la densidad”, sostuvo González Palacín, quien no olvidó los “más de 2.000 ataques de lobos denunciados” este año, más otros que “ni se avisan porque son a vacas de montaña que el ganadero se entera semanas después”.
Lamentó como “mala noticia” para cerrar el año que el Ministerio de Agricultura no vaya a “pelear” por el cambio de régimen del lobo al sur del Duero en Bruselas. En contraprestación habrá un plan de acción al que UCCL presentará alegaciones, pero en el que no confía. “Será difícil bajar la densidad por la presión ecologista, pero no puede ser que en el sur haya más de 600 lobos haciendo daños todos los días. Debe ser gestionable”, espetó.
En cuanto a la plaga de topillos, lamentaron las limitaciones para las quemas de rastrojos que han sufrido los profesionales y anunciaron que no se ha quemado ni un diez por ciento de lo planteado al principio.
Remolacha
Por otro lado, la opa criticó los “incumplimientos” por parte de la Administración agraria y urgió, tanto a la Junta como a Azucarera, a pagar lo que debe a los remolacheros tras las dos sentencias de los tribunales conocidas este 2016. En primer lugar, en relación a los expedientes de 2011 para abonar la ayuda de tres euros por tonelada de tubérculo prometida por el departamento y en que el TSJ ya ha dado la razón a los productores. “Esperemos que la Consejería sea responsable y pague legalmente, porque no se pueden cambiar las reglas a mitad de la partida”, exigió.
En segundo lugar, la petición está dirigida a British Sugar, que ofreció 2,30 euros por tonelada a sus socios y después “les obligó a renunciar a derechos históricos a cambio”. “En los tribunales también hemos ganado y es sentencia firme. Tienen que abonarlo”, reiteró. Entre la Junta y la empresa azucarera adeudan a los remolacheros más de un millón de euros. En ambos casos, UCCL amenazó con movilizaciones en 2017 “si no se coge el torno por los cuernos” en este aspecto.
En todo caso, abogó por “empezar de cero” una vez se satisfagan estos pagos para negociar la nueva situación provocada por la supresión de las cuotas el año próximo. “Hemos perdido la mitad de la superficies y podemos recuperalo fuera de las cuotas. Es una oportunidad llegando ahora a acuerdos para tener rentabilidad vía precios”, instó.
También abordó el cultivo de la patata en un año “excepcionalmente bueno”, pero con una “inestabilidad enorme”. Por ello, para superar esta situación, recordó que las organizaciones han apostado por la Interprofesional, pero faltan requisitos.
PAC
Sobre la PAC, pidió que en la revisión que se afrontará este año próximo se trabajen “mecanismos de intervención para que los precios no bajen por debajo de los costes de producción”. También demandó el desarrollo de las leyes Agraria y de la Cadena Alimentaria, “un anhelo” de UCCL. “Los agricultores no quieren vivir de las ayudas, sino de los productos que venden. Rico no te vas a hacer, pero al menos vivir dignamente”, respaldó.
Por su parte, el presidente de UCCL Valladolid, Ignacio Arias, lamentó la “completa dejación de funciones” de la Consejería en relación con las cámaras agrarias, ya que “se tendría que haber modificado el reglamento” para la representatividad de cara a las elecciones de 2017. “Es una vergüenza. Ni siquiera dan la cara en esta materia”, denunció.