La Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) ha desestimado el recurso de apelación interpuesto por el asesino de la peregrina Denise Pikka y ha confirmado la condena impuesta por la Audiencia Provincial de León a 20 años de prisión, así como al pago de las costas del juicio, según la sentencia emitida por el órgano judicial.
Según la sentencia, el primer motivo de alegación del recurso presentado no puede aceptarse “porque ya fue desestimado fundadamente” por la Sala en febrero de este año “resolutorio de su planteamiento como cuestión previa”, al igual que sucede con el segundo. La sentencia recuerda que el jurado declaró haber atendido como elemento primordial de convicción para considerar probada la mayor parte de los hechos determinantes de la culpabilidad del acusado “a las propias manifestaciones” que hizo M.A.M.B. “No desmentidas en cuanto tales ni en cuanto a su contenido en el acto del juicio, sin que quepa oponer en este caso la alegación de que la confesión del acusado ha dejado de ser la prueba reina”.
Junto con la confesión del acusado, el órgano judicial reconoció que el jurado manifestó haber atendido, para declarar probado cada uno de los hechos objeto de su veredicto, a “otros elementos de convicción” como el informe forense en el caso de la dinámica de la agresión y la causa de la muerte; y respecto al hallazgo del cadáver, a la circunstancia de que se produjo porque el acusado sabía dónde se encontraba, y lo indicó, sin olvidar que también la policía y los forenses confirmaron el enterramiento provisional anterior que el acusado describió. Aspectos todos ellos que “no carecen de base razonable los pronunciamientos del tribunal en cuanto a la condena del acusado como autor de la muerte de la víctima”.
20 años de cárcel
La Audiencia provincial de León condenó el pasado mes de abril a M.A.M.B. como autor material del asesinato de la peregrina Denise Pikka en abril de 2015, en un fallo en el que se le impuso una pena de 20 años por acabar con la vida de la mujer norteamericana en las proximidades de Castrillo de los Polvazares y tres por un delito de robo con violencia.
Los hechos tuvieron lugar el 5 de abril de 2015 cuando la peregrina norteamericana se encontraba realizando en solitario el Camino de Santiago y se desvió de la ruta para conocer la localidad de Castrillo de los Polvazares. En un momento se desorientó y pasó por delante de la finca en la que vivía el acusado, que la acompañó durante un tramo del trayecto antes de golpearla en la cabeza con un objeto contundente.
Como consecuencia del impacto, la peregrina sufrió fractura a nivel temporoparietal-esfenoidal derecho, múltiples fracturas en región naso-orbitaria, fracturas lineales en mentón y rama mandibular derecha, con pérdida de tejido óseo en la región alveolar anterior y desprendimiento de un diente y fractura de la corona de otro, fracturas en ambos lados y en la base del cráneo, así como como fracturas de cuatro costillas, y que provocó su muerte por traumatismo cráneo-encefálico severo.
El acusado arrastró el cadáver a un lugar apartado, le realizó un corte en el cuello y la desnudó para acelerar el proceso de descomposición, y lo ocultó bajo tierra tras seccionarle las dos manos en otro lugar, que no han sido localizadas. Ante la presión policial, el acusado desenterró el cuerpo y lo trasladó al lugar al que fue localizado más tarde. M.A.M.B. fue detenido ese mismo año en Asturias y, tras sus declaraciones, el cuerpo de la peregrina fue localizado ese mismo día.