El alcalde de Astorga, Arsenio García, ha emitido un escrito en el que comunica a los portavoces de la Corporación “la prohibición de realizar grabaciones ilegales en las comisiones informativas del Ayuntamiento”. Después de los hechos ocurridos el día 25 de enero de 2016, cuando el portavoz de Izquierda Unida, José María Jañez, y la concejala del PSOE, Mercedes González Rojo, pusieron encima de la mesa una grabadora y un teléfono móvil para registrar la Comisión informativa especial de Cuentas, Administración y Personal y la comisión de Medio Ambiente, “sesiones declaradas no públicas por el reglamento de Organización, Funcionamiento y Régimen Jurídico”, el alcalde y los presidentes de las comisiones informativas, al amparo del informe de Secretaría emitido, solicitan que” dejen apagados sus teléfonos o cualquier otro dispositivo que permita grabaciones sobre la mesa del secretario”.
Los concejales Jáñez y Rojo, al parecer, después de varias pesquisas internas, venían realizando esta práctica sin solicitar ningún permiso previo. De hecho fue un miembro del PAL quien se percató de las grabaciones clandestinas del miembro de IU, quien al ser recriminado argumentó rápidamente que “la concejal del PSOE también estaba grabando”.
El alcalde ha consultado con el secretario y la normativa al respecto. Y si bien no se desea llevar al Juzgado estos hechos “porque no queremos judicializar la vida municipal”, el enfado de Arsenio García es mayúsculo, pues el informe legal revelan una “conducta inapropiada de los corporativos de los grupos de la oposición al margen de la Ley”. Y es que, según las Bases de Régimen Local, los miembros de las corporaciones locales “están sujetos a responsabilidad civil y penal por los actos y comisiones realizados en el ejercicio de su cargo”.
