ICAL La Dirección General de Tráfico (DGT) ha puesto hoy en funcionamiento un nuevo radar Pegasus en sus helicópteros que se suma a los dos ya existentes. Su objetivo es controlar la velocidad en las carreteras, principalmente las vías convencionales, que son las más peligrosas y donde se produce el mayor número de accidentes y fallecidos. Se encargará de la zona noroeste que integran Castilla y León, Galicia, Asturias y Cantabria, según informó hoy el Ministerio del Interior.
Este nuevo radar se incorpora a uno de los 12 helicópteros de los que dispone la DGT. Actuará desde las bases de Valladolid y La Coruña, aunque podrá sobrevolar otras carreteras de España cuando sea necesario.Al igual que sus antecesores está dotado de un mecanismo y un software incluido en la cámara de vigilancia que llevan los helicópteros de Tráfico, de modo que capta la velocidad de los vehículos, además de otras infracciones.
Desde que se puso en marcha el primer radar Pegasus, en marzo de 2013, hasta ahora se han realizado 498 horas de vuelo, se ha controlado la velocidad de 9.960 vehículos y se ha denunciado a 1.778 conductores por circular a una velocidad superior a la permitida. La velocidad media a la que circulaban los conductores de los vehículos denunciados era de más de 30 kilómetros por hora por encima de la estipulada.
Aún así, la velocidad máxima detectada y denunciada en una carretera con límite de 120 kilómetros por hora fue de 232. En carreteras con límite de 100 km/h se detecto un vehículo a 195 kilómetros por hora y en el caso de carreteras limitadas a 90 kilómetros por hora, la velocidad máxima a la que fue interceptado un conductor fue de 162 kilómetros por hora. Estos excesos de velocidad han supuesto la pérdida 1.360 puntos a los conductores denunciados, destacando que a 24 de ellos, se les retiraron seis puntos (infracción muy grave).
Los radares Pegasus constan de dos cámaras, una panorámica que facilita el seguimiento y captación de la velocidad y otra de detalle que tiene un objetivo que permite leer la matrícula del vehículo llegando incluso a poder detectar velocidades de hasta 360 kilómetros por hora. Tal y como estipula la Ley, el nuevo radar ha sido verificado y homologado por el Centro Español de Metrología, organismo dependiente del Ministerio de Industria, Energía y Turismo.
Este tipo de radares resultan operativos incluso a 300 metros de altura y a una distancia en línea recta con el vehículo controlado de un kilómetro tal y como se ha podido comprobar en las imágenes que periódicamente facilitamos a los medios. Como anunció el mes pasado la directora general de Tráfico, María Seguí, en las próximas semanas irán entrando en servicio otros tres nuevos radares Pegasus de modo que cada uno de los Centro de Gestión que la DGT tiene ubicados en la Península y Baleares tengan este medio para vigilar las carreteras.