Así se desprende del último censo, correspondiente al año 2018, que elaboran de manera conjunta las comunidades autónomas de Cantabria, Castilla y León, Asturias y Galicia
La cifra autonómica refleja un saldo vegetativo negativo de 7.857 personas, más la salida de 2.344 ciudadanos hacia otras autonomías y la llegada de 2.522 de otros países