Por muy mal que se comportara, Tony Soprano siempre será el mafioso más atractivo para millones de espectadores. Desde la pantalla y la literatura, personajes a los que juzgaríamos inmorales en la vida real nos causan simpatía. Mª José Alcaraz, de la Universidad de Murcia, estudia cómo las cualidades estéticas de una obra artística influyen en la reacción emocional y moral del espectador