Hasta siempre Antonio Martínez, compañero del alma, compañero

Nos conocimos en 1998 casualmente en una tarde de verano que visitamos tu pueblo la Maluenga, allí te encontramos trabajando con tus manos en la reconstrucción de la Iglesia.

Desde entonces hemos hecho muchas cosas juntos. Tu homenaje en La Maluenga de la Casa de León en Madrid, La Boda Maragata en la que quisiste que fuera el novio. En todos los desfiles de la Transhumancia en Madrid. Nos enseñaste el Torreón de los Osorio y nos presentaste a los Marqueses de Astorga.

Nos acompañaste en el duelo de mi hijo José Rafael de una manera entrañable. Asististe con flauta y tamboril a todas las cenas veraniegas de mi casa de Castrillo.

Has sido un buen padre de familia, un empresario de éxito y un líder social. El lema de tu vida ha sido” Solamente se vive lo que se convive y solamente se tiene lo que se comparte”. Ayer a media tarde cuando conocimos tu fallecimiento quedamos desolados. Una infinita tristeza invadió a toda mi familia.

Sirvan estos versos de Pedro Salinas para terminar esta sentida despedida :

“Ni en el llegar, ni en el hallazgo tiene el amor su cima: es en la resistencia a separarse, en donde se le siente, desnudo,altísimo, temblando.”

Antonio Martinez, descanse en paz.

Rafael Álvarez , Margarita Pastor y Carmen Álvarez Pastor