La consejera de Sanidad, Verónica Casado, destacó hoy que se confirma la “tendencia general al descenso” en la incidencia del COVID-19 en Castilla y León, un mes después de la aplicación del segundo estado de alarma y 32 días tras la entrada en vigor del conocido como ‘toque de queda’. Esta “bajada bastante clara” se detecta tras el “pico” registrado a principios de noviembre, dijo, y avanzó que los datos serán mejores en 15 días.
En su comparecencia para informar de la evolución del COVID-19, destacó que en la última semana se han notificado 6.001 casos, frente a los 8.860 de la anterior y los 10.450 de hace 14 días. A estos se unen los 552 casos comunicados este martes, que para la consejera siguen siendo “muchos”, pero remarcó que la bajada es “bastante clara”.
Todas las provincias, apuntó Verónica Casado, se sitúan por encima de los 500 casos por cada 100.000 habitantes, excepto de Ávila y Segovia, que están por debajo de este umbral. A su juicio, desciende lentamente la incidencia, como el índice de reproducción que es inferior a uno, con un 0,8 por ciento de media en la Comunidad, frente al 1,02 de Palencia, la única que supera el uno.
De esta forma, la consejera recordó que Castilla y León se mantiene en nivel cuatro, con diferencias en el caso de Segovia que presenta mejores datos y Burgos en el lado opuesto, pero recalcó que en esta última provincia la incidencia del virus también desciende. Por municipios, Casado destacó las cifras “muy elevadas” de Burgos capital, Zamora y de Laguna de Duero y Medina del Campo (Valladolid), que recalcó preocupan.
Igualmente, la titular de Sanidad avanzó que en estos dos municipios vallisoletanos de momento no se dan las condiciones para hacer cribados masivos con test de antígenos de segunda generación, que se aplicarán en la zona de Eras de Renueva en la capital leonesa, así como en los municipios de Guijuelo y Peñaranda de Bracamomente (Salamanca). En total, precisó que se han hecho 62.538 pruebas en la última semana.
En cuanto a la presión en los centros hospitalarios, recordó que hay 1.460 enfermos, 1.231 en planta y 229 en UCI, con una ocupación del 69 por ciento en las unidades de hospitalización y del 71 por ciento en las de críticos sobre el total de plazas habilitadas. Además, el Edificio Rondilla alberga a 30 pacientes, 27 de Valladolid, dos de Burgos y uno de Palencia, y el Divino Vallés, 23 enfermos.
Finalmente, la consejera Verónica Casado lamentó que 27 personas han fallecidos en las últimas horas.