Ical/ Servimedia El presidente del Gobierno en funciones y líder del PP, Mariano Rajoy, avisó este miércoles de que el pacto suscrito por los líderes del PSOE y Ciudadanos, Pedro Sánchez y Albert Rivera, tiene “medidas vaporosas” y sería “catastrófico para el empleo”.
Rajoy contestó así al discurso de investidura que pronunció este martes Sánchez como candidato a la Presidencia del Gobierno. Aseguró que con las medidas “vaporosas” que plantea el líder socialista “crear empleo es una pretensión imposible”.
“No es exagerado afirmar que estamos ante un programa ruinoso para la economía, disolvente para la confianza y catastrófico para el empleo, con pactos o sin pactos”, indicó el jefe del Ejecutivo en funciones.
Lo dijo en la jornada en la que se conoció que el número de parados registrados en las Oficinas de los Servicios Públicos de Empleo en España aumentó en febrero en 2.231 personas en relación con el mes anterior, dato al que no hizo mención expresa.
“Usted llama progreso al retroceso, al involucionismo, a la sinrazón de arrasar lo que hacen otros, aunque sea bueno, por la simple razón de que lo han hecho otros”, criticó, para afirmar que el “eje central” de su programa es “una contrarreforma”.
Igualmente, Rajoy reprochó a Sánchez sus propuestas para reducir el déficit público cuando en los últimos cuatro años del Gobierno del PSOE se incrementó el déficit en 117.000 millones, mientras que en los cuatro años de su Gobierno, reivindicó, se ha reducido en 50.000 millones. “¿Cómo puede hablar de déficit en esta Cámara, con qué autoridad?”, planteó.
España, “en zona de sombra”
Rajoy reprochó a Sánchez que su “actitud” ha abierto “de par en par una gran puerta a la desconfianza”. “Nos ha colocado en una zona de sombra y muchas inversiones y ofertas de empleo aguardan a ver qué pasa”, lamentó.
“No son aventuras lo que necesita España y no es el mejor situado para ahuyentar los recelos”, advirtió a Sánchez, para criticar su pasado y su aval a una política “que nos arruinó”.
Criticó que “siempre siembran déficit y paro con la misma naturalidad que diciembre trae los catarros y la primavera, las alergias”, afirmó. “Estos precedentes existen y dejan un regusto muy amargo”.