PRECAMPAÑA/ El PP de Astorga cambia de cabeza de lista

A. J. García Nistal Parece que el mes de febrero, el plazo que desde Madrid, Valladolid y León se han marcado para ir conformando en primer lugar las cabezas de lista municipales no se respeta. A la presión mediática por ejercer de Nostradamus se le suman los egos e intereses particulares; ¡ah la vanidad que decía el poeta clásico…! Pero no contentos con ello, aparecen redacciones escolares con su particular cosmovisión política de andar por casa.

Puestos así, siempre reservando parte de la información dada porque si no se respeta la fuente la pierdes, vamos a avanzar lo que se sabe desde hace tiempo pero que hoy nos apetece decir por si alguien sigue cazando gamusinos y jugando a lo que no es. Hay mucho especialista de todo y  se queda en superficie de la nada. Jacinto Bardal no va a tener una tercera oportunidad. Se lo habrán insinuado a estas alturas, pero se lo comunicarán oficialmente en estos días. “Tato” va a tener en bandeja ser el diputado de zona, siempre y cuando el alcalde de Encinedo y él se trabajen bien a los concejales y alcaldes del partido judicial. Los órganos superiores del PP ven con buenos ojos que Astorga tenga un diputado después de muchos años coartada esa posibilidad, pero va a tener su oportunidad. ¿Quedó claro? ¿O lo decimos en lleunés?

El PP a los tres niveles que se mueve una candidatura del tamaño de Astorga baraja tres posibles nombres: Arsenio García Fuertes como persona de consenso de todas las partes, pero al que no le hace ninguna gracia y que cuenta con ciertos problemas de ocupaciones académicas que le hacen resistir a la propuesta; en segundo lugar María Emilia Villanueva, actual procuradora regional, delegada de Educación y concejala en Astorga, que es vista con agrado porque sería una compensación al no repetir para las Cortes. Si ganasen en Astorga dejarían la Dirección de Educación, suponiendo una victoria del PP regional, y si no, podría continuar con esa difícil carga en León. Además, es mujer, lo que es del agrado para enfrentarse con otra mujer, Victorina Alonso, de carácter, algo que en la política astorgana de difícil consenso parece ser necesario, y con experiencia de administración y gestión. El último nombre, es el empresario y concejal Jarrín. Gusta en muchos aspectos, pero para ser sinceros es la tercera posibilidad. El resto es hablar por hablar. Pero en política, como en la vida misma, la ciencia no es exacta. Y hasta el rabo todo es toro.

Insistimos, al PAL de Peyuca, la única candidatura seria y anunciada, le está al caer la de Victorina Alonso por el PSOE con importantes cambios. Podemos, Vox e IU están todavía pendientes de trámites y conversaciones.

A nivel comarcal se está produciendo una huida de alcaldes socialistas a la UPL siguiendo la estela de Matías Llorente, entre los que destaca Gaspar Cuervo de Valderrey. Y la liza de diputado por el socialismo comarcano se encuentra entre el actual alcalde de Hospital de Órbigo, Bustos, y Llamas de Villaobispo de Otero.

Un amigo, jefe de informativos de una emisora me comentaba: creo que tenemos hueco quince días este año para otras elecciones, ¿podíamos montar algo para no aburrirnos?