La Policía Local de Astorga ya cuenta con un detector de drogas gracias a la adquisición de un dispositivo a través de la concejalía de Seguridad Ciudadana. Hasta la fecha, el cuerpo carecía de los medios técnicos propios, y ahora se podrán realizar los controles de manera arbitraria junto a los controles de alcoholemia.
“Es el ánimo de este Equipo de Gobierno y la concejalía de mejorar los medios y condiciones para la Policía Local de Astorga, con la adquisición de éste detector de drogas”, comunicó Ángel Iglesias, concejal de Seguridad Ciudadana. La compra se ha realizado por valor de 4.000 euros, entre tres ofertas que recibieron, “nos inclinamos por éste aparato, porque cubre las expectativas y es un dispositivo de vaguardia, de última generación”, explicó el Jefe de la Policía Loca, Juan Carlos Rodríguez.
La Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial indica que se pueden utilizar los dispositivos de detección de drogas en saliva, demostrados como seguros jurídicamente, con la presencia de agentes homologados a tal efecto. “Los controles de drogas no son nuevos, similares a las sanciones de alcoholemia. Sin embargo, a diferencia de éstos, se tipifica y se sanciona que haya presencia. Las sanciones administrativas van desde 1.000 euros hasta la retirada de 6 puntos en el carnet”, añadió Rodríguez.
“Confío que no tengamos que denunciar mucho este tipo de actividades, pero esperemos que el conocimiento de estos controles sirva como disuasorio para que el usuario de la vía pública se mentalice más de que la conducción bajo los efectos del alcohol o de las drogas, está perseguido y controlado en el municipio de Astorga y sus pedanías”. Para empezar, se han adquirido 25 cartuchos para realizar los tests de drogas.
Especificaciones técnicas
El equipo cuenta con un estuche pequeño y muy portátil que porta tanto el aparato de medición como los cartuchos utilizados. “Es tan cómodo, que la Dirección General de Tráfico ha adquirido 130 dispositivos para que los puedan llevar los motoristas”, informó Juan Antonio Rojo, de la empresa de tecnología para la seguridad ciudadana, Tradesegur.
El control va alimentado a baterías y no necesita conexión a la red para funcionar. Se compone de un analizador y una impresora para emitir el ticket correspondiente. “Es un equipo indiciario, y la prueba siempre irá sujeta a un análisis posterior de laboratorio. Es decir, que si da positivo, se tomará una segunda muestra para enviar a un laboratorio toxicológico, donde se emitirá un informe para que sirva como prueba pericial”, añadió Rojo.
El equipo siempre va a acompañado de unos cartuchos totalmente informados por el número de lote. La tecnología es de tira reactiva, “similar a la que utilizan los tests de embarazo”, impregnada de metabolitos de cinco drogas: THC, Cocaína, Anfetaminas, Metanfetaminas y Opiáceos. “Cuando entran en contacto con la saliva, en caso de que haya presencia de una de estas drogas, no reaccionan los metabolitos, y si no hubiera presencia reaccionan. Es decir, que la ausencia de reacción da el positivo”, dijo el experto técnico.
Los tests de drogas se pueden hacer a través de varios fluidos, como la sangre, la orina o la saliva. No obstante, “la presencia tanto en sangre como en saliva indica un consumo reciente, y por tanto cumple la función de detectar el consumo de drogas antes de coger de conducir, la ventana de permanencia en ambos fluidos es la misma”. No existe una doble prueba, porque el aparato indica la presencia de drogas, sin embargo, la prueba pericial será el análisis de un laboratorio, “por si pudiera darse el caso de un falso positivo, aunque según los análisis realizados por la DGT, el supuesto de error es menor a 0,3% de los casos”.