Planetas extrasolares

 

Año tras año el Observatorio Astronómico de Madrid, edita un anuario, un libro con una abundantísima cantidad de datos de índole astronómica y de áreas del conocimiento afines. Es un libro que los aficionados a la astronomía consultan con mucha frecuencia y que además contiene datos de gran utilidad para topógrafos y otros profesionales similares. En este libro es costumbre insertar cada año algunos artículos de divulgación científica y en este año aparece uno cuyo autor es Julio Solís García (Agencia Estatal de Meteorología), que curiosamente no habla casi nada de los fenómenos atmosféricos, si no de los planetas extrasolares.        Esta publicación de J. Solís García me servirá de base para redactar este artículo que básicamente es un resumen de lo escrito por J. Solís García, eliminando del mismo los conceptos que pueden resultar de más difícil comprensión para personas, no aficionadas a la astronomía.

Hay que empezar diciendo que el Sol es lisa y llanamente una estrella mas de las miles que vemos en el firmamento. Una estrella que tiene en torno a si varios planetas, uno de los cuales es La Tierra. Por tanto la pregunta que desde hace siglos se planteó es obvia. ¿No existirán también planetas girando en torno a las otros muchísimas estrella que vemos que son en definitiva soles?. En los siglos XV y XVI eran muy pocos (casi ninguno) los pensadores que se atrevía a afirmar que las estrellas eran soles y que dada su enorme distancia a nosotros parecían diminutos puntos de luz. Sin embargo ya en el siglo XVIII, los sabios de entonces comenzaron a admitir que el Universo era por lo que parece infinito y que no existe esa mítica bóveda celeste en la que las estrellas estarían pegadas como las luces de una cúpula. A pesar de ello hace tan sólo unos 40 años nadie tenía una prueba evidente de que en torno a otras estrellas distintas a nuestro sol hubiese planetas. Se especulaba eso si con que podría ser que si, pero una especulación no es una certeza.

La tecnología de hace sólo 40 años no permitía distinguir si hay o no en torno a estrellas otros cuerpos que no emiten luz tan intensa como estas y por ello estos planetas que existen en torno a otras estrellas, eran sólo una mera hipótesis o suposición.

PLANETAS FUERA DEL SISTEMA SOLAR

En los primeros años de la década de los 90 del pasado siglo XX, se empezaron a detectar en torno a algunas estrellas otra serie de cuerpos celestes que no eran lo que entendemos por una estrella. Bien es cierto que hay cuerpos celestes (llamados en general “enanas marrones”), cuyas características son intermedias entre lo que es una estrella y un planeta. Así pues los primeros descubrimientos de planetas situados fuera del Sistema Solar, no estaban a veces exentos de ciertas dudas. Según señala J. Solís García los primeros planetas extrasolares detectados eran gaseosos (como nuestro “vecino” Júpiter) pero mas grandes y mas calientes. Es decir se trataba de cuerpos celestes que aún cuando no se pudiesen considerar estrellas, presentaban unas características muy diferentes a las de La Tierra.

Sin embargo las técnicas de detección de esos cuerpos celestes han ido mejorando y se han descubierto planetas fuera del Sistema Solar que no son enormes masas gaseosas si no que están formados por materia sólida como La Tierra. Se considera que tienen atmósferas similares a las de Venus o La Tierra. También se especula con la posibilidad de que en ellos haya agua líquida. Hasta el año 2013 se había confirmado la existencia de unos 1000 planetas fuera del Sistema Solar. Es cierto que no todos recuerdan a La Tierra; pero una cifra de 1.000 es ya muy elevada.

En la actualidad se están detectando un número cada vez mayor de planetas que tiene cierto parecido con La Tierra y situados a una distancia de su estrella tal que permitiría que en los mismos hubiese unas condiciones de temperatura y luminosidad compatibles con el desarrollo de la vida tal y como se cree que surgió en nuestro planeta. Los científicos han establecido un llamado “Índice de Similitud con La Tierra” (IST),para determinar numéricamente el parecido entre La Tierra y otros planetas fuera del Sistema Solar. Este índice varía entre 0 y 1. El mayor valor del IST indica mayor parecido con La Tierra. Ya se conocen algunos cuyo índice es del 0,8 es decir similar o incluso superior al de Venus.

Otro dato de interés que se señala en el artículo de Julio Solís García es el descubrimiento en febrero de 2017 de un conjunto de planetas (7 en concreto) girando en torno a una estrella que es mas pequeña que nuestro sol. Son planetas rocosos es decir similares en este aspecto a La Tierra. Se le llama Sistema TRAPPIST-1 ( no sería lógico llamarle Sistema Solar) y tres de sus 7 planetas se sitúan al parecer dentro de la que se denomina zona habitable, es decir una zona en la que podrían darse unas condiciones ambientales parecidas a las de La Tierra.

En definitiva nos encontramos en unos momentos en los que a medida que pasan los meses (se hacen eco a menudo los medios de comunicación) van surgiendo nuevos descubrimientos de planetas que en algunos casos parecen tener unas condiciones medioambientales que podrían ser compatibles con la vida tal y como la conocemos en La Tierra. Aclaro no obstante que esto no quiere decir que tengan unos mares, unos ríos, una atmósfera y unas temperaturas iguales a las de La Tierra, pero no olvidemos que en La Luna (y en Marte), también es posible vivir, aunque con una serie de limitaciones lógicamente.

Por último señalo que las informaciones que nos van llegando a este respecto hay que analizarlas con cuidado. Hay que distinguir entre la información de profesionales como el Sr. Julio Solís García y de organismos serios (Observatorio Astronómico de Madrid por ejemplo) y lo que es una representación artística y mas o menos fantasiosa de la superficie de un planeta . La imagen que adjunto esta tomada de la Red (www.aboutespanol.com) y es una representación artística y mas o menos imaginativa de un planeta que el autor que figura en esa publicación ( Salvador Hernáez),llama exoplaneta Kepler 452-b. Yo me he limitado a copiar la imagen para “alegrar” y acompañar un poco este texto, pero nada mas.

Madrid, 10 de febrero de 2017

Rogelio Meléndez Tercero

 

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