Pensar mal no asegura el acierto

Cuando todos escuchamos y leemos en los diversos medios de comunicación conceptos como política, partidos, ideología… es probable que pocos generen en su intelecto términos relacionados con entendimiento, cooperación y compañerismo. Seguramente muchos de ustedes incluso puedan encontrar infinidad de ejemplos que les permitan corroborar sus “malos” pensamientos. Evidentemente muchas han sido las acciones y actitudes que han ido generando este tipo de percepciones en nuestra mente pero también es cierto que existen acciones contrarias que deberían demostrar otro tipo de actitudes y que quizás no tengan cabida de igual forma en los medios de comunicación. El objetivo del presente artículo es mostrar en detalle como los conceptos reflejados al inicio del presente artículo pueden ser relacionados igualmente con términos como entendimiento, compañerismo…

¡Para muestra, un botón! dice el sabio dicho popular. Pues bien, durante el primer fin de semana del presente año se ha desarrollado en nuestra ciudad un evento deportivo organizado por Nuevas Generaciones del Partido Popular de Astorga. Una actividad que ha permitido que cerca de 150 jóvenes de nuestra ciudad y alrededores hayan podido disfrutar de los amigos y de la competición en plena época navideña. En dicho torneo, al igual que los que se han organizado por esta agrupación con anterioridad, nuevas generaciones trabaja para que cualquier joven dispuesto a participar pueda hacerlo sin necesidad de cumplir ningún tipo de requisito político o afiliación. Dicha cuestión, que a mi entender no podría ser de otra manera, ha levantado alguna suspicacia en algunos colectivos ciudadanos que parecen no entender que aquí lo importante es lo que nos une y no lo que nos separa. Evidentemente entre todos los participantes siempre se ha contado con personas de pertenencia a otras siglas políticas o a otras ideologías pero dicha circunstancia, lejos de provocar conceptos como los enunciados al inicio de este artículo, han servido para demostrar que la cooperación y el entendimiento entre estas personas es posible, al menos en el terreno deportivo, y por tanto que pueden extraerse muy buenas conclusiones de una mera actividad lúdica.

Evidentemente el que está detrás de estas líneas es conocedor de que el firme de la política es muy diferente al de una cancha de juego, pero sí considero que muchas de las actitudes y valores mostrados en el deporte pueden ser extrapolables al terreno político. Quizás, algún día, muchos de estos jóvenes dejen el polideportivo para ocupar un lugar en el salón de plenos, una vez allí cada equipo seguirá defendiendo su camiseta, respetando al árbitro e intentando ganar el partido, pero llegado el momento puede ser bueno recordar los valores y actitudes desarrollados durante este torneo.

Durante estos días el terreno deportivo ha mostrado que una mera actividad lúdica sirve para unir a un enorme colectivo juvenil de la ciudad, dejando de lado ideologías, partidos o formaciones y centrándose en lo realmente importante, el bien común.