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Apostar por el sector primario, la especialización del turismo y la implantación de las nuevas tecnologías son algunas de las propuestas para revitalizar el mundo rural que este domingo lanzó el presidente del PP y candidato a la Presidencia del Gobierno, Pablo Casado, en un acto público celebrando en la capital leonesa.
“Somos el partido de la España rural, el que sabe cómo servir a los que viven en los pueblos”, dijo en una intervención en la que dedicó especial atención a las necesidades de los pueblos.
“Una economía productiva en el entorno rural es confiar en el sector primario. En la última legislatura de Zapatero el PSOE abandonó la negociación de la Política Agraria Común y el PP logró después traer 47.000 millones”, lamentó antes de defender la necesidad de “intensificar nuestra apuesta por los que se quedan en los núcleos rurales”.
También aludió al turismo de interior, como generador de riqueza y herramienta para fijar población Casado, que apuesta por cubrir todo el territorio nacional con alta velocidad, con 300 megabytes (Mb), reprochó que el Gobierno de Sánchez -en lo que definió como “las rebajas de primavera” reduzca la capacidad de conexión de Internet de los pueblos. También criticó que se recorten las pensiones de viudedad en función de la renta o las partidas para asuntos sociales de las comunidades autónomas. “Hay un 70 por ciento más para Cataluña y recortes para Galicia y Castilla y León”, dijo.
“Quiero que mis hijos vean que su abuelo vivió en una casa de adobe y que su bisabuelo iba en burro”, dijo en alusión a la visita que este domingo hizo también a la localidad de nacimiento de su padre, Matadeón de los Oteros.
“En un día en el que reivindicamos la España rural”, dijo, el PP mantiene su defensa de las diputaciones y de la prestación de servicios en los pueblos, al contrario que otros. “Ahora nos dan lecciones de lo que hay que hacer en el mundo rural los que querían suprimir las diputaciones, decían que tener pueblos abiertos era un despilfarro y despreciaban la vocación política de los que no cobran”, remarcó.
Para el líder del PP, “no hay que venir como dando limosna a la gente que quiere estar en el medio rural. Hay que garantizar la prestación de servicios en el entorno rural y nosotros hemos conseguido que los mayores se puedan quedar en sus pueblos”.
También hizo alusión a la caza “que para algunos es exótica y para otros reivindicable” y que genera, recalcó, 6.000 millones y 195.000 empleos vinculados al sector energético. Por otra parte, se refirió al mundo de los toros, que suponen una actividad económica de 3.000 millones al año y 170.000 puestos de trabajo.
Casado quiso, por otro lado, aludir al final de la minería. “No apuesto por una descarbonización demagógica. Creo que la generación energética de León tendrá que seguir siendo rentable conforme lo digan lo que pagan esa industria o conforme a los acuerdos de Europa”, manifestó antes de lamentar que “una ministra, porque quiera hacerse muy moderna, haya que adelantar cinco años el cierre”. “Sabemos que hay que reconvertir el sector, pero no adelantar los plazos. Al final, las ocurrencias cotizan en bolsa”, añadió.
Revolución fiscal
El aspirante a la Presidencia del Gobierno dijo que quiere promover una “revolución fiscal”, con la supresión por ley del impuesto de patrimonio, sucesiones, reducir el IRPF por debajo del 40 por ciento y por debajo del 20 el de sociedades.
Respecto a Sánchez, comentó que preside “el Gobierno más desigualitario y radical de la historia de la democracia. Va a hacer bueno a Zapatero”y dijo que si logra gobernar estará supeditado al independentismo.
Parador de San Marcos
Casado, que estuvo acompañado del presidente autonómico del PP, Alfonso Fernández Mañueco, en un acto al que asistieron más de 300 personas frente al Parador de San Marcos, comprometió el impulso de su reforma integral, cuya segunda parte carece de financiación para su ejecución.
’Viernes sociales’
“Los ‘viernes sociales’ de Sánchez son una hipoteca para todos los ciudadanos”, afirmó Daniel Lacalle, quien arropó a Pablo Casado y remarcó este domingo en León que los llamados ‘viernes sociales’ del Gobierno de Pedro Sánchez son “una hipoteca para todos los ciudadanos. La generosidad con el dinero de los demás es expolio”, dijo.
“No podemos permitir que España vuelva a caer en una crisis. Los socialistas sólo saben repartir la miseria; lo primero que tenemos que hacer para afrontar la recuperación es echar a Pedro Sánchez”, dijo y añadió que España no puede ser el único país que se enfrenta a una ralentización moderada subiendo “brutalmente” los impuestos y aumentando los gastos.
