Este domingo 27 de mayo la Catedral de la bimilenaria fue testigo de la odenación sacerdotal del diácono Daniel Pérez Quintela por el obispo de Astorga, Juan Antonio Menéndez.
Con las letras del Kyrie y Gloria comenzó la ceremonia mientras los sacerdotes, el presbítero y el Obispo ocupaban sus puestos. El templo mayor de la diócesis de Astorga estaba repleto de los familiares del futuro sacerdote y de los fieles que no quisieron perderse el nombramiento.
Tras la interpretación de la primera y segunda lectura; y tras el evangelio comenzó la liturgia de la ordenación. Una vez presentado el nuevo sacerdote al Obispo y tras la homilía Pérez Quintanela entregó simbólicamente sus manos al Obispo como muestra de obediencia y respeto a la Iglesia. Durante la Súplica Litánica, el candidato se postra en el suelo para orar.
Para finalizar los gestos sacramentales de la ordenación el Obispo impuso sus manos junto a la de todos los sacerdotes alli presentes y recitó la oración en la que Juan Antonio se dirigió a Dios por Daniel que fue la señal de que ya ha sido transformado y hecho imagen e instrumento de Cristo Sacerdote, Cabeza y Pastor.
Asimismo, el nuevo presbítero celebrará su primera misa solemne el próximo viernes 1 de junio a las seis de la tarde en el Santuario de las Ermitas, dentro del ayuntamiento de O Bolo en Ourense.
Sobre Daniel Pérez
El diácono Daniel Pérez Quintela nació el 3 de mayo de 1982 en Bourdeaux, Francia. A los cuatro años se traslada a Lugo, España, donde realiza sus estudios de Primaria y Secundaria. Estudia Ingeniería Técnica Agrícola en Industrias Agrarias y Alimentarias en la Universidad pública de Lugo, obteniendo el grado de Licenciatura.
En el año 2011 ingresa en el seminario mayor de Astorga, realizando sus Estudios Eclesiásticos en el Instituto Teológico Compostelano y en el Centro Superior de Estudios Teológicos de León. Recibió la ordenación de diácono el pasado 17 de septiembre de 2017 en la capilla del seminario de Astorga.
Ha realizado su etapa pastoral como capellán del hospital comarcal de O Barco de Valdeorras y en las parroquias del CAP de Rubiá de Valdeorras. El lema que ha escogido para su ministerio es “Haced lo que Él os diga” (Jn 2, 5). Son las palabras que la Virgen María, de la que Daniel es muy devoto, dirige a los sirvientes en las bodas de Caná. En adelante, Daniel, tendrá que hacerlas realidad en su vida y proponerlas a los demás como pastor y evangelizador de la Iglesia.