Este fin de semana tuvo lugar una nueva edición del formato que bajo el título de ‘Conversaciones sin red’ inició la concejalía de Cultura del ayuntamiento de Villarejo de Órbigo el pasado año. Con una gran asistencia de público, Juan Antonio Menéndez, acudió este fin de semana a la Sala Cultural Caja España de Veguellina donde habló sobre su vida y su intensa labor social.
Tomás-Néstor Martínez Álvarez fue, como en pasadas jornadas, el encargado de presentar a monseñor Menéndez. Acompañado por el recién designado vicario general de la diócesis, José Luis Castro, el acto contó con la asistencia de los párrocos del municipio, muy interesados en escucharle, muchos feligreses y otros muchos vecinos de las localidades del municipio.
El prelado desgranó detalles muy personales de su vida, como que entró “en la vocación mientras leía Rey de Reyes, cuidando las vacas en el prado”, haciendo un recorrido por una larga vida pastoral, que le llevó a ser nombrado obispo de Narai (Argelia), y posteriormente obispo auxiliar de Oviedo.
También detalló su intenso trabajo “desde la Comisión de Emigraciones” donde desarrolla un trabajo solidario constante, entre otros detalles un convenio de El Barco de Valdeorras donde se ha conseguido crear un piso de acogida para refugiados.
Desde que fue nombrado obispo de Astorga, es habitual verlo por la ciudad paseando a su padre en la silla de ruedas, se remarcó en la presentación, porque “”e gusta mucho hablar con la gente y estar cerca de la gente”, algo que él resumió como que “aquí estoy como un ciudadano más”. Porque “ahora es tiempo de caminar”, dijo ante los muchos asistentes citando, como hace habitualmente, a Teresa de Jesús.