Una imagen de la puerta de un vehículo destrozada por la supuesta explosión de un bote de gel hidroalcohólico que pasó demasiado tiempo al sol se ha convertido en viral en los últimos días a través de las redes sociales y los servicios de mensajería, normalmente acompañada de un mensaje advirtiendo sobre los peligros de dejar estos geles dentro del coche cuando suben las temperaturas.
Sin embargo, como advierten en la web especializada maldita.es, se trata de otro bulo que recorre internet y que también ha circulado en otros países. Según explican varios expertos, aunque estos geles contienen alcohol y son inflamables, es altamente improbable que un bote de gel hidroalcohólico arda o mucho menos explote por sobrecalentamiento sin la intervención de agentes externos como fuego o una chispa, ya que el punto de autoignición del etanol se sitúa por encima de los 360º, una temperatura a la que no llega el interior de un coche ni siquiera bajo la luz solar directa.
En cualquier caso, sí es recomendable mantener estos productos alejados de fuentes de calor y del fuego.