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El año pasado, ingresaron en España 900.000 inmigrantes de los cuales apenas poco más de 20.000 lo hicieron de manera “irregular”, estas son las cifras que baraja la Comisión de Migraciones de la Conferencia Episcopal Española de la que el obispo de Astorga, Juan Antonio Menéndez, es su presidente. Además, añadió este martes, el pasado año quedaron en España 100.000 inmigrantes, “la migración rota y se marchan a otros países, no se quedan en España todos los que llegan”.
El prelado asturicense se trasladó los pasados 14 y 15 de julio hasta Estocolmo para reflexionar sobre la sensibilización de esta problemática, dar a conocer la actividad que la iglesia católica realiza en el campo de la migración y cómo combatir las falsas noticias que “alteran y manipulan la realidad de la migración”. A este respecto, criticó que “a veces, los medios abordan el fenómeno sólo desde el punto de vista político y económico confrontando los problemas de los inmigrantes con los ciudadanos del país que generan incomprensión y alimentan la xenofobia. Es necesario abordar la cuestión migratoria en su complejidad sin banalizar los hechos relacionados con el fenómeno migratorio o magnificarlos”. A este respecto, recordó que los inmigrantes ayudan a crear riqueza en un país y recordó todos los directivos extranjeros de las empresas, los futbolistas y demás migrantes que residen en España actualmente.
A lo largo del encuentro han podido escuchar un proyecto de Cáritas Suecia y de otras Cáritas de Europa que promueven la cultura del encuentro a través de las redes sociales rastreando las noticias que se dan sobre los migrantes, desmintiendo las falsas y dando a conocer la verdadera realidad de la migración. De esta forma se conciencia a la población sobre la verdad de la inmigración. “Durante los días de reunión también hemos podido encontrarnos con la comunidad migrante musulmana y otra comunidad católica de hispanoamericanos que nos obsequiaron con danzas y con productos típicos”. Concluyó el encuentro con una celebración presidida por el cardenal de Estocolmo en la parroquia de Santa Eugenia y una peregrinación al Santuario de Santa Brígida, copatrona de Europa.
Experiencia de la iglesia
En Estocolmo se puso de manifiesto también la importancia que tiene el hecho de que la iglesia sepa comunicar lo que piensa sobre la migración y la defensa de los derechos inalienables de la persona. “La iglesia es quizá la única institución en el mundo que puede hablar de los migrantes desde todas las perspectivas. En este encuentro se ha podido constatar esta realidad”. Explicó Menéndez que las iglesias del sur de Europa entre las que se encuentra la iglesia española, llevan a cabo “una importante labor de acogida de inmigrantes en colaboración con la administración y otras organizaciones no gubernamentales”. En los países del este como Ucrania, Polonia, Rumanía, las iglesias son emisoras de inmigrantes que llegan a occidente “buscando una vida mejor o un refugio de la persecución como es el caso de Ucrania”. La Iglesia católica en las comunidades del norte de Europa (Suecia, Noruega, Islandia…) está “fundamentalmente formada por inmigrantes que nos hablan de sus problemas espirituales, materiales y de todo tipo”.
Acerca de España, monseñor Menéndez señaló que los países de la Península Ibérica, “por la experiencia de haber sido migrantes”, no han reflejado brotes de xenofobia como sí ha sucedido en otros países de Europa. “La mentalidad española es abierta y de acogida, en el país, la iglesia ha participado en 108 campañas de acogida a inmigrantes, ya desde los años 60 con la llegada a España de cubanos”, explicó.
Con esta reflexión, el obispo de Astorga aboga por el entendimiento entre ambas partes y recordó que la labor de la iglesia en este sentido es subsidiaria, “quienes tienen que realizar políticas migratorias son los gobiernos”.
Mafias
Uno de los problemas más graves, adujo Menéndez, es la existencia de mafias que se lucran de la necesidad de las personas por encontrar un futuro mejor para ellos y sus familias. “Necesitamos políticas de inmigración comunes en España y en Europa y no que los inmigrantes sean utilizados como arma arrojadiza a nivel político”, criticó el presidente de Migraciones de la Conferencia Episcopal Española.
A este respecto, apuntó que en las Naciones Unidas se han propuesto pactos globales sobre refugiados y migraciones, para trabajar tanto en origen como en destino. Sin embargo, Estados Unidos ya ha rechazado estos pactos. “No hay crisis migratoria como tal, siempre ha existido la migración, hay crisis en la política migratoria”, especificó el prelado.
Para concienciar acerca de la problematica y el trabajo que realiza la Red MIgrantes con Derechos que forman Cáritas Española, Comisión Episcopal de Migraciones, CONFER, y Justicia y Paz, se ha realizado un vídeo que habla precisamente del trabajo que se realiza en Ceuta con la llegada de inmigrantes procedentes de África Subsahariana, “personas para quienes regresar por el desierto a sus países de origen puede suponer la muerte”.
