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Astorga vuelve a mostrar su cara más solidaria. Ante la situación que Ucrania está viviendo, los astorganos se han concentrado esta mañana, de manera silenciosa en la plaza Mayor, por el país afectado.
Desde el Ayuntamiento de Astorga también están sumamente concienciados con la causa. Esta mañana, Natalia Fridentlal, ucraniana afincada en la bimilenaria desde hace cuatro años, junto a su hermana Anja, se han reunido con el alcalde, Juan José Alonso Perandones, y la concejala de Servicios Sociales, Chayo Roig, para abordar el conflicto y la manera de ayudar desde Astorga.
Solo hay una familia ucraniana en el padrón municipal, la de Natalia, la idea que tienen desde el Consistorio es alquilar viviendas amuebladas para acoger y atender a lo largo del tiempo, de momento, a dos familias.
«Queremos estar en contacto con vosotras para que lo que hagamos sea eficaz, porque hay que pensar no solo en acoger también en lo que viene después. Queremos trabajar con seriedad, y estamos a vuestra entera disposición», explicó el regidor.
«Me parece una salvajada lo que está pasando en Ucrania, como un pueblo quiere vivir libremente y no lo dejan. La esperanza que hay es la solidaridad europea, sobre todo por parte de Polonia», alegó Perandones.
Natalia ha explicado que precisamente Polonia entiende esta situación mejor que nadie: «Históricamente, Polonia estuvo bajo la influencia de la URSS y saben la tiranía que supone, por eso entienden el peligro que hay, pero la diferencia es que ellos están cubiertos por la OTAN, nosotros no. No entiendo porque la organización no quiere entrar en el conflicto, tienen que entender que no se puede negociar con una persona como Putin, que ya ha amenazado a Europa».
«Entiendo que hay muchos países dependientes de Rusia, España no tanto, pero quiero recalcar la solidaridad de la gente particular en España. Se me saltan las lagrimas al pensarlo, hay tanta empatía, se me pone la piel de gallina«, alegó Natalia.
Anja, hermana de Natalia, tuvo que abandonar Kiev cuando comenzó la invasión rusa: «Llevó una semana en Astorga, desde el miércoles pasado. Al principio nos resistimos a abandonar, no nos crearíamos que había llegado la guerra, pero cuando comenzamos a escuchar bombardeos decimos irnos, mis hijos y yo. Mi marido está ayudando en un hospital ucraniano».
El resto de la familia de Natalia y Anja se encuentra en Ucrania, en un refugio: «De momento están escapando de las explosiones, y ojalá que sigan así, porque ellos no quieren abandonar su tierra. Mi hermana tuvo suerte porque, al día siguiente de escapar, empezaron a bombardear su barrio».
«Me siento orgullosa de ser ucraniana, sobre todo, en estos momentos, por el coraje que están demostrando desde el ejército. Están desapareciendo ucranianos porque Putin ha dado la orden de matarlos, porque ve que no puede conquistarnos. No tiene criterios humanos, solo tiene odio, es lo que corre por su sangre. Es increíble que mujeres embarazas, en su noveno mes, y niños enfermos tengan que coger un arma y disparar, y la OTAN es neutral ante esta situación, increíble», explicó Natalia.
Por último, el regidor ha reiterado que tienen las puertas abiertas por parte del Ayuntamiento: «Estamos esperando las directrices por parte del Gobierno de España, pero tened por seguro que en Astorga estaréis arropadas por el Consistorio y por sus ciudadanos«.
