La Consejería de Fomento y Medio Ambiente vaticinó un “buen” año en materia de incendios si el tiempo no varía y destacó que el estado de alarma provocado por la pandemia del covid-19 ha afectado “mínimamente” a la limpieza de montes, principalmente aquellos de utilidad pública que son propiedad de la Junta.
“Las perspectivas con los datos actuales son buenas, pero nunca podemos adelantarnos mucho con una previsión porque las circunstancias meteorológicas pueden cambiar y complicarse todo”, sentencian fuentes del departamento dirigido por Juan Carlos Suárez-Quiñones.
A día de hoy, con la información disponible, las fechas de inicio de campaña de riesgo alto se mantiene para el 1 de julio, pero también están a expensas de las condiciones meteorológicas y un posible cambio “brusco”.
Con datos cerrados a 31 de marzo, los últimos conocidos, la superficie arbolada calcinada por incendios cayó un 86 por ciento en el primer trimestre 2020, con solo 40,7 hectáreas, respeto al promedio de la última década en el mismo periodo (291 hectáreas), gracias a las abundantes lluvias de marzo y abril.
El estado de alarma afectó de forma ligera a los trabajos de tratamiento silvícolas en los montes que realiza la Consejería a través de sus cuadrillas de tierra, de trabajos de prevención y extinción de incendios. “La parada fue mínima y no generalizada durante las peores semanas de la pandemia. Hay que tener en cuenta que el operativo de incendios se considera esencial y siguió funcionando”, sostienen las mismas fuentes, aunque con limitaciones en los trabajos no esenciales, que se recuperan en estas últimas semanas.
Además, recuerdan que los años de abundantes lluvias en primavera, como es el caso de 2020, siempre traen consigo el “aumento de las plantas herbáceas anuales, que al final de su ciclo se secan y suponen un incremento de biomasa herbácea en el natural”. Pero también, este tipo de años permiten que la vegetación arbustiva y arbórea (leñosa) “tenga mucha más humedad y, por tanto, facilite menos su combustión”.
Por último, la Junta expresa que en los montes de utilidad pública, la Junta de Castilla y León, a través de sus cuadrillas, está actuando en aquellas zonas que pudieran tener más riesgo. Para el resto de montes, y especialmente en los entornos urbanos, se están concediendo ayudas y se firmarán convenios con todas la diputaciones provinciales y ayuntamientos para la limpieza de las mismas.