Eva María Pereira, la mujer ciega en cuya historia se basa el libro ‘Quién te robó el arcoíris’, presentado hoy por el Consejo Comarcal del Bierzo, vive en la localidad leonesa de Fabero con sus dos hijas, donde llegó huyendo de un pasado de violencia y vejaciones y donde ha rehecho su vida. Hoy ha contado su historia para intentar ayudar a otras mujeres que viven en el mismo infierno del que ella consiguió escapar. Lo primero que quiere dejar claro es que no se considera ninguna “heroína” y que no la gusta que la “aplaudan”. “Solo soy una persona que quiere aportar su granito de arena”. “Nadie es mejor que nadie”, explica con relación a otras víctimas.
“Me maltrataba y me dejó ciega de una paliza, y me siguió pegando. He sufrido las peores vejaciones, pero se puede salir”, afirma emocionada. “El maltratador se cree que es lo mejor, el más listo, pero tiene un cerebro pequeño. Él se levantaba a pegarme, peor yo conseguí escapar con mis dos hijas”, indica. “Yo tuve una infancia feliz y de repente una persona me lo quitó todo, pero supe salir a tiempo y mis hijas son ahora felices”, expresa.
Según esta mujer, para que una víctima deje a su maltratador hay que hablar con ella, hacer que sea ella quien lo decida, “porque si no, volverá”. En su opinión, si una mujer no está preparada para abandonar a un maltratador, y regresa una y otra vez a su lado, hay que velar por los hijos. “Yo escucho que hay niños que ya con 14 años pegan a sus amigas, a lo que ellos llaman novia. Y es que estamos criando maltratadores. Los niños que ven el maltrato en su casa puede llegar a pensar que es normal que el hombre pegue a la mujer, que la domine; al igual que las niñas que es normal que las peguen, que las dominen”, manifestó.