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El Centro de Idiomas de la Universidad de León (ULE) ofrece desde el pasado 17 de marzo alternativas para dar continuidad a la actividad de enseñanza que desarrolla de forma habitual. Como explican desde el propio centro, “la formación presencial que se estaba impartiendo en nuestras instalaciones se trasladó a los domicilios de los estudiantes, utilizando para ello medios de aprendizaje basados en la videoconferencia en tiempo real y otros recursos virtuales”.
Estas medidas se llevan a cabo con una buena aceptación por parte de los alumnos y en estos momentos son más de 700 los estudiantes que gracias a estas soluciones “reciben a los profesores en sus propias casas”.
El retorno por parte del alumnado es muy satisfactorio, lo que lleva a los responsables a animar a los que puedan estar interesados en conocer de primera mano la experiencia, a quienes se indica que aún están a tiempo de “aprovechar la oportunidad de probar este nuevo sistema”. Los propios profesores manifiestan que “la acogida de los alumnos ha sido bastante buena”, y además la situación ha provocado “una mayor implicación y participación en las clases”.
Junto a las clases de idiomas modernos, se imparten las de español dirigidas a los alumnos internacionales, de los que se apunta que “algunos retornaron a sus países de origen y otros continúan en nuestra ciudad”. Cabe recordar que el Centro de Idiomas de la ULE ha lanzado como acciones complementarias varias actividades gratuitas abiertas a la participación de todos, sean o no alumnos del centro, como son sesiones del Club de Lectura en inglés y francés y talleres de fonética y de idioma alemán, con el fin de ayudar a sobrellevar esta situación de confinamiento.
De forma paralela, se van a lanzar varios cursos de preparación de pruebas de acreditación, y de conversación en varios idiomas, además de los habituales cursos ‘a tu ritmo’, también de conversación”. Otra de las actividades gratuitas es un cuentacuentos en inglés para los más pequeños.
