E.J.G/ICAL Marcos Martínez Barazón ha presentado este lunes su dimisión como presidente de la Diputación de León mediante un escrito en el registro de la institución provincial.
En dicho documento, Martínez insiste en ser inocente “de todos los cargos que se me imputan en el Auto del Juzgado Central de Instrucción número 6 de Madrid”, dentro de la denominada como ‘Operación Púnica’. A su vez asegura que su situación procesal es “injusta” y que seguirá proclamando su inocencia en todo momento, “consideran que no se me puede achacar la realización de ninguna actividad ilícita penal”, matiza.
Con todo ello, y para no perjudicar el normal desarrollo de las instituciones, Marcos Martínez ha decidido presentar su dimisión y renuncia como presidente de la Diputación de León pero mantiene su acta de diputado provincial.
Además, abandona su militancia al Partido Popular de manera voluntaria. De esta forma, el ahora encarcelado por la operación anticorrupción Púnica pasará a formar parte del grupo de no adscritos de la institución provincial, mientras sus hasta ahora compañeros de filas elegirán como sucesor al alcalde de Valdelugueros, Emilio Orejas.