Vecinos de Filiel, acompañados por algunos vecinos del municipio de Lucillo, como Boisán y Molinferrera, se han concentrado frente al consultorio médico de la localidad para “reivindicar la apertura y funcionamiento de su servicio de atención médica, sumándose así al llamamiento por parte de la Coordinadora de Plataformas por la Sanidad Pública en Castilla y León”, señalan a través de un comunicado.
Recuerdan que el pasado mes de diciembre del año 2019, se presentó y quedó aprobada por mayoría en el pleno del Ayuntamiento de Lucillo “una moción para que la Junta de Castilla y León retirara la reforma del sistema sanitario en las zonas rurales, evitando cualquier eliminación de consultas médicas en los consultorios en funcionamiento”. Señalan que en marzo del 2020, a raíz de la crisis sanitaria por causa del COVID-19, “se cerraron los consultorios rurales de este municipio (a excepción del de Lucillo) y, a pesar de las promesas y afirmaciones sobre su reapertura por parte de la Consejería de Sanidad, así como de la aprobación de la moción en el Ayuntamiento, los consultorios siguen cerrados y su servicio médico suspendido”.
Señalan que en Filiel hay cartillas sanitarias e instalaciones “suficientes” para la reapertura que evitaría el desplazamiento de personas “que no disponen de vehículo propio o que tienen disminuida su movilidad, sobretodo en casos de las personas más mayores”. Asimismo, la Junta Vecinal de Filiel dirigió, en julio de 2020, un escrito al gerente de Atención Primaria de León, a la responsable de área de Astorga y a la Consejería de Sanidad, con la respuesta de que se tomarían las medidas necesarias y “no hubo más respuestas”.
Los vecinos presentaron de forma individual una solicitud de queja múltiple ante el Procurador del Común de Castilla y León, sin que se haya recibido respuesta alguna por el momento. Casi un año después, el consultorio de Filiel sigue cerrado y los pacientes siguen desplazándose como pueden a Lucillo.