S.Gallo/ ICAL El Colegio Oficial de Trabajo Social de León ha hecho hoy un llamamiento a las administraciones y organismos competentes para que se impulsen iniciativas que permitan la aproximación de los servicios sociales a los ciudadanos que tienen más necesidades en la provincia de León, sobre todo teniendo en cuenta que se trata de un territorio en el que el envejecimiento, el sobreenvejecimiento y la dispersión poblacional son las principales características. Esta petición surge a raíz de las conclusiones obtenidas en una investigación que se ha llevado a cabo en los dos últimos años y que recoge la publicación ‘Los servicios sociales del siglo XXI en el mundo rural leonés’ editado por la Fundación MonteLeón.
Una de las investigadoras que ha llevado a cabo este estudio, María Jesús Domínguez, resaltó que el estudio ha permitido detectar que las diferentes zonas de la provincia de León una estructura poblacional “regresiva” con y un gran desequilibrio poblacional en lo que al género se refiere, con mayor presencia de hombres que de mujeres “hasta los 65 años”, una tendencia que cambia a partir de esa edad. Este dato marca una situación de “vulnerabilidad” de las mujeres de mayor edad en la provincia de León.
En el actual panorama social y económico, se han detectado nuevas complejidades en los servicios sociales de ámbito rural, algo que requeriría de un planteamiento integral de los servicios sociales en esta zona, dadas las peculiaridades en materia de accesibilidad, proximidad y flexibilidad, entre otras. También el éxodo rural de la segunda mitad del siglo pasado, y que hoy todavía condiciona las estructuras poblacionales, han motivado importantes desequilibrios demográficos.
La provincia de León es la más extensa de la comunidad también se está viendo afectado por los procesos de pérdida de relevancia del mundo rural, como son la despoblación, la dispersión, la baja densidad de población y un envejecimiento notable con la elevada demanda de prestaciones y servicios de los usuarios mayores de 75 años. Por otro lado, en los años 2011 y 2012 se detectó un aumento significativo de la demanda de atenciones básicas desde los servicios sociales, lo que refleja cómo la situación de crisis económica ha afectado de manera especial a las personas más vulnerables, y la situación de quienes tienen menos ingresos ha seguido deteriorándose.
Otra de las propuestas que se hace desde el Colegio de Trabajo Social de León, a raíz de estas y otras conclusiones, es la importancia de trabajar “en red” en servicios educativos, servicios sociales y servicios sanitarios, para así tener un carácter organizado en esta materia. Domínguez resaltó también que, en general, los usuarios de los servicios sociales tienen una opinión “positiva”, aunque matizó que hay que medir esas opiniones “con la mentalidad de muchas personas que piensan que no tienen derecho a tener una vida digna”.
Entre las peticiones principales que realizan los ciudadanos a los servicios sociales se encuentran la petición de información, alojamientos alternativos o la solicitud de recursos económicos. A raíz de este estudio y de sus conclusiones, el Colegio Oficial de Trabajo Social de León quiere convertirse en “la voz” de los usuarios y profesionales “que no encuentran cauces ágiles para la atención de sus necesidades”, sobre todo después de haber detectado la tendencia “a la disminución de recursos y al incremento de las demandas en el ámbito rural”, declaró Domínguez.
El gerente de la Fundación MonteLeón, Dionisio Domínguez, recordó que el trabajo pretendía conocer “en profundidad” las necesidades de los servicios sociales y asistenciales en la provincia de León, así como la realidad de la prestación de estos servicios. Así se quiere ofrecer un conocimiento “exacto” de una situación “muy compleja” con el fin de que las administraciones y otras instituciones puedan “de manera objetiva” abordar una mejor respuesta a la demanda de estos servicios “esenciales”, de manera especial en el entorno rural.