Cerca de 3.000 profesionales sanitarios de toda Castilla y León, entre ellos los del Centro de Salud de Astorga, se concentraron este jueves a las puertas de hospitales y centros de salud de todas las provincias de la Comunidad para pedir a la Junta la retirada del decreto que regula las prestaciones laborales del personal de Sacyl. Además acusaron a la Consejería de Sanidad de estar jugando con la salud de los castellanos y leoneses y reclamaron respeto y un refuerzo de las plantillas.
En manifiestos conjuntos elaborado por los sindicatos con representación en la Mesa Sectorial de Sanidad -Satse, CSIF, CESM, UGT, CCOO y USAE- se denunció el intento de imponer al personal sanitario unas condiciones de trabajo “asfixiantes” que no permiten una atención de calidad a los pacientes.
Los representantes sindicales denuncian que la imposición del decreto es “abusiva” y supone la pérdida total de derechos. Además, se criticó que desde la Junta se ha pasado de elogiar la labor de los profesionales sanitarios a “maltratarlos”.
La secretaria general de la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitairos de CCOO, Ana Rosa Arribas, acusó a la Junta de sembrar el enfrentamiento entre la población y los profesionales sanitarios, “algo que no vamos a permitir”. Además, argumentó que si desde la propia Consejería de Sanidad se reconoce que los profesionales están cumpliendo y asumiendo su responsabilidad, no hace falta este tipo de decretos.
Por su parte, el secretario autonómico de la Federación de Empleados de Servicios Público de UGT, Tomás Pérez, acusó al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, de “traicionar” a los trabajadores al romper la negociación que estaba abierta y le recordó que “no se negocia publicando decretos en el Bocyl un sábado por la mañana”.
En la misma línea se pronunció la secretaria autonómica de Satse, Mercedes Gago, que reclamó a la Consejería de Sanidad alcanzar un acuerdo en la mayor parte de los puntos para perjudicar lo “menos posible a los profesionales, pero sobre todo a los pacientes, dado que estos recortes y estas condiciones laborales repercutirán de forma negativa en la atención a los ciudadanos.
León
En el caso de León, las concentraciones se produjeron de manera simultánea en los Hospitales de la capital y en el de El Bierzo, así como ante la Gerencia de Atención Primaria y a las puertas de los consultorios médicos de la provincia, donde los profesionales sanitarios pidieron “responsabilidad, respeto y seriedad” ante lo que aseguraron que se trata del “mayor abuso jamás realizado sobre las condiciones de trabajo de cualquier tipo de empleado público”.
En el caso del Hospital de León fueron casi medio millar de personas, entre médicos, enfermeros, celadores, auxiliares y personal de todas las categorías los que salieron a la puerta principal del edificio para protestar contra un decreto que “se carga los derechos de los empleados de la Sanidad de Castilla y León”, mientras que hasta ese momento planteaban “jornadas de 35 horas y regulación de condiciones de teletrabajo”.