Los Jiménez volverán a sorprender a Astorga con nuevos desafíos

Como parte de la programación de las fiestas de Santa Marta, la familia Jiménez ofrecerá, este miércoles, a las siete de la tarde en la Plaza Mayor, una exhibición de sus habilidades, entre las que destacan los arrastres de vehículos y el rompimiento de piedras
Un momento de una de las exhibiciones de la familia en la Plaza Mayor

 

P.F. Los Jiménez; una familia conocida a nivel internacional por sus particulares habilidades. Y es que, desde el primero hasta el último de esta saga dedica su vida a probarse a sí mismo en diversas disciplinas llevando a la práctica hazañas impensables para la gran mayoría de la población. Son muchos los que han tenido ya la oportunidad de ver a estos intrépidos ‘amantes’ del reto y el riesgo en acción. Y los que no, tendrán la ocasión de presenciar una de sus exhibiciones este miércoles en Astorga, donde ofrecerán un espectáculo variado, con un programa rico en números de todo tipo, empezando por una muestra de arrastre de vehículos hasta el rompimiento de piedras de más de 150 kilos de peso sobre el abdomen.

La familia astorgana dará lo mejor de sí para dejar a la ciudad que les vio crecer en buen lugar, actuando, una vez más, en uno de sus lugares favoritos, la Plaza Mayor de Astorga. Y como no podía ser menos, rodeada de la gente de ‘casa’, como lo han ido haciendo los últimos diecisiete años.

Entre los números que se ofrecerán al público destacan ejercicios de elasticidad y fuerza, arrastres y rompimientos, realizados por diversos miembros. Así, el patriarca de la familia y reconocido profesional de las artes marciales, Luis, volverá a dejar sin palabras a los asistentes con sus números de fuerza y resistencia e intentará sorprender llevando a cabo el más difícil todavía; arrastrará un autobús con 80 personas en su interior y moverá a otras 200 en una escalera. Todo esto sin más ayuda que su pelo. Sandra, actual campeona de arrastre con el cuello a nivel mundial, moverá más de 10.000 kilos de peso con esa parte del cuerpo; Christian, a pesar de su corta edad, con los 18 recién cumplidos, hará lo mismo con 4.500 kilos y Billy promete brillar en su especialidad, el rompimiento de piedras de más de 150 kilos en el abdomen. Todo esto y mucho más es lo que esta dedicada familia ha preparado para este miércoles, como parte de la programación de las fiestas de Santa Marta de Astorga.

Esfuerzo y dedicación con mucho riesgo

Esta familia reconoce que sus habilidades cuestan, día a día, mucho esfuerzo. “La gente no es consciente del riesgo y los sacrificios que conlleva dedicarse a algo así”, señalan. “Los que nos ven creen que es lo que se ve, pero no es así, lo que hay detrás es mucho, empezando por la plena dedicación que conlleva, teniendo en cuenta que fracasar puede costarte muy caro, incluso la vida en algunas ocasiones”. Los Jiménez, sin embargo, no obvian los peligros que entrama esta profesión, y por eso, las revisiones médicas y la precaución son su lema. “Todo lo que hacemos lo hacemos con cabeza, por supuesto no evita que alguna vez pueda pasar algo, pero no por falta de cuidado y siempre escuchando la opinión de los médicos”.

Aspiración: Entrar en el Libro Guinness de los récords

Su fama les precede, pero la mayor aspiración de esta saga es poder estar presentes en el Libro Guinness de los récords. En total son cinco los desafíos que se han marcado y con los que pretenden batir récords mundiales.

Luis moverá un autobús lleno de gente con el pelo, 9.500 kilos de peso con los dientes, 3.500 con la perilla y 1.500 con el pene. Sandra, por su parte, desplazará otros 10.000 kilos con el cuello. “Nos consta que hasta ahora nadie lo ha hecho, por lo menos no se ha dado a conocer, y queremos ser los primeros”, indicó Billy, miembro de este linaje. A la espera de la confirmación, la familia seguirá preparándose, como hasta ahora, y ofreciendo un buen espectáculo a los asistentes de Astorga y de todo el mundo, porque hay que destacar que los Jiménez han llevado a cabo exhibiciones en toda Europa, así como en algunos países del otro lado del charco.

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