El IVA digital reducido y la ejecución de los pagos adeudados por las administraciones públicas son prioritarios para los editores.
Junto a las medidas urgentes es necesario un plan estratégico para el sector editorial, garante de la democracia en la lucha contra la desinformación.
Semanas después de que se decretara el confinamiento para hacer frente a la pandemia del COVID-19 la situación de los editores de publicaciones es crítica. Mientras nuestros productos y servicios de información y de entretenimiento son más demandados que nunca por la ciudadanía y más necesarios para el eficaz funcionamiento de la sociedad democrática, sus ingresos se han desplomado.
El Gobierno de España ha reconocido que las publicaciones periódicas son un servicio esencial, los puntos de venta están autorizados a abrir y las webs de los editores se actualizan permanentemente, pero no hay ingresos.
Las cuatro principales asociaciones del sector -Asociación Española de Editoriales de Publicaciones Periódicas (AEEPP), Asociación de Revistas de Información (ARI), Asociación de Prensa Profesional y Contenidos Multimedia (Coneqtia) y Asociación de Revistas Culturales de España (ARCE), que representan a más de 260 grupos editoriales, con más de 1.500 cabeceras informativas y una audiencia superior a 60 millones de usuarios, han reiterado al Gobierno de España la necesidad de medidas urgentes que ayuden a la supervivencia del sector.
Los asociados de estas cuatro asociaciones valoramos el impacto de la crisis en la cuenta de resultados en 250 millones de euros por la caída en las ventas, difusión, publicidad (papel y digital), eventos y producción de contenidos y otros servicios.
Por este motivo reclamamos al Gobierno de España la adopción de las siguientes medidas urgentes:
1- Campañas de publicidad y comunicación institucional, en TODAS las publicaciones periódicas en papel y digital.
Desde el inicio de la crisis del COVID-19 las revistas y webs de editores de publicaciones periódicas han sido totalmente ignoradas. Es un agravio que impide la competencia con otros medios, mientras que las publicaciones periódicas realizan una gran labor de información y entretenimiento a los ciudadanos.
2- Reconocimiento del servicio público de información y entretenimiento de las publicaciones periódicas y ayuda directa para compensar la caída de la publicidad y la difusión. Desgravación especial por la publicidad que se destine a publicaciones periódicas, papel y digital, como medida de apoyo a este sector de interés especial.
3- IVA digital. Transposición de la directiva de la Unión Europea para las publicaciones digitales: 4% IVA para publicaciones y contenidos digitales.
4- Ejecución urgente de los pagos adeudados por las Administraciones Públicas a editores, distribuidores o quiosqueros, por devolución de impuestos, campañas publicitarias o por cualquier otro concepto.
5- Facilidad y rapidez para abordar Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) en tanto duren las medidas restrictivas derivadas de la situación creada por el COVID-19.
6- Suspensión del IBI a los puntos de venta de publicaciones periódicas durante todo el año fiscal 2020. Abono de 500 euros a cada punto de venta profesional, catálogo de más de 600 títulos, por cada semana que hayan permanecido abiertos durante el confinamiento.
Junto a este paquete de Medidas de Choque, la AEEPP ha propuesto al Gobierno la puesta en marcha de un Plan Estratégico de Ayuda a las Publicaciones Periódicas.