I.M.P / ICAL La Plataforma de Bomberos Profesionales de Castilla y León se presentó hoy en Ponferrada con un mensaje claro: El plan presentado la semana pasada por la Junta y la Diputación de León para la extinción de incendios es “ilegal” y supone un “riesgo importante para la población”. El plan fue anunciado la semana pasada por el consejero de Medio Ambiente de la Junta, Antonio Silván, y el presidente de la Diputación provincial, Marcos Martínez, y se basa en la creación de retenes municipales -con un mínimo de cuatro personas- dotados de material y de una ayuda a las administraciones locales para su matenimiento, en lugar del parque comarcal o de los retenes profesionales que demandan los sindicatos y agrupaciones de bomberos.
Los profesionales opinan que las personas que atenderán los retenes o “centros de emergencia, no saben ni cómo llamarlos” no están preparadas pues “solo recibirían un cursillo de 20 horas. No van a tener conocimientos teóricos ni prácticos para asistir a rescates, a fuegos en zonas industriales, al tratamiento de mercancías peligrosas… ni van a pasar por las pruebas para tener unos requisitos físicos adecuados”, señaló el portavoz de la Plataforma, José Ignacio García. Además, acusan a Junta y Diputación de fomentar el “intrusismo” en su profesión.
La plafatorma no descarta acciones legales si los centros de emergencia se ponen en funcionamiento. “Acudiremos a la Fiscalía”, explicó García, que añadió que ya cuentan con escritos favorables a su postura, como los del Procurador del Común, en caso idéntico de Zamora, ciudad en la que también han acudido ya a los tribunales. Además, los bomberos ponen de relieve que los ayuntamientos podrían incurrir en ilegalidades si los operarios de los retenes se ven obligados a irrumpir en hogares y otras propiedades privadas sin permiso previo y al no estar contemplada esta posibilidad en la ley. Los Bomberos expresan que, de hecho, el plan incumple la propia Ley de Seguridad Ciudadana de la Junta, que establece que el servicio de extinción de incendios “debe ser prestado por profesionales”.
En las misma línea se pronunció en León el sindicato CSIF, que demanda parques comarcales con bomberos “profesionales” y que entiende que estos centros de emergencia no aportan ninguna solución nueva” a las “carencias” de la provincia en la lucha contra el fuego.
El responsable del Sector de Administración General de la Junta en León, Pedro Bécares, recordó que el Ejecutivo autonómico dispone de medios materiales y humanos que podrían apoyar “perfectamente” a los parques que realmente se creen. El operativo de extinción de incendios forestales en la actualidad está formado, según explicó el sindicato a través de un comunicado, de 16 camiones con dos dotaciones, dos motobombas y dos pick-up conveniadas de entidades locales, así como 18 puntos de vigilancia.
Se trata de trabajadores fijos discontinuos con periodos de llamamiento que oscilan desde los cuatro a los nueve meses al año y para los que CSIF lleva años proponiendo a la Consejería de Fomento y Medio Ambiente la ampliación “progresivamente hasta cubrir todo el año” para el apoyo a los parques comarcales, para campañas invernales y para la mejora de la prevención de los incendios forestales “prácticamente eliminada en la actualidad fuera de la época en peligro alto”, señalaron.
Igualmente denunciaron el “agravio comparativo” que sufre León, ya que los 22 puntos donde “supuestamente” se materializarán estos centros locales contra el fuego, ya estaban “detallados” en un plan elaborado por la Junta en el año 2010, un documento en le que se fijaban siete puntos para la provincia de Valladolid, de los que al menos cinco cuentan ya a día de hoy con parques profesionales de bomberos, explicaron.