Frío, mucho frío de ese que el viento recoge en el Teleno y esparce a sus anchas por la Maragatería. Soplaba con ganas la mañana de este sábado de Carnaval en el partido del Atlético Astorga Juvenil ante los bercianos de la Ponferradina B. Campo duro, encuentro muy disputado y al final los tres puntos para nadie. Se los llevó el viento.
Zarpazo en un minuto
Eso fue lo que los maragatos tardaron en ponerse por delante en el marcador. Acababa de pitar el colegiado el inicio del partido y los de casa trenzan su primera jugada. Balón al área que sale rechazado y le queda franco a Omar. Cruza desde lejos al palo largo y poco puede hacer el portero berciano. 1-o, gol tempranero y buena inyección de moral para los locales.
A partir de ahí el Astorga siguió intentándolo y se mostraba cómodo en el campo. Con el marcador a favor mantenían bien la posesión aunque sus llegadas no llevaban demasiado peligro. La Ponfe estaba un poco desdibujada, y parecía que le costaba entrar en el partido.
Pero a medida que iban pasando los minutos la balanza comenzó a equilibrarse. Para desgracia de los maragatos, su 9, Manu se resiente del tobillo y tiene que ser sustituido. Para ese momento los de casa ya habían cedido la posesión a la Ponferradina. Pero sin ocasiones demasiado claras para ninguno de los dos conjuntos. El partido convertido en un quiero y no puedo llegaría al descanso con el marcador a favor del Astorga por la mínima.
Vuelan los tres puntos
Tras la reanudación, los locales volvieron a salir al campo llevando la iniciativa. Omar estuvo muy bien por su banda creando bastante peligro, pero al igual que en el primer acto no se llegaba a rematar con claridad. Se estaba viendo todo igual que en los anteriores 45 minutos. Intentos de ambos equipos que acababan en nada. La mayoría de los centros los arrastraba el viento bien lejos. Ni el tiempo, ni el estado del campo acompañaban para jugar demasiado bien.
El gol del empate tendría que llegar fruto de una jugada a balón parado. Córner que bota la Ponfe en el minuto 78, buen remate de cabeza de Iker, que pica abajo, bota y para dentro. Fue un visto y no visto. Los locales que no habían podido cerrar su ventaja cedían ahora también terreno en el marcador.
Poco más se pudo ver esta mañana. Algún que otro arreón tanto maragato como berciano para intentar llevarse los tres puntos pero con más corazón que cabeza. Al final, los chicos parecía que daban el empate por lo “menos malo” que podía pasar. Pitido final y reparto de puntos.
Tercer partido consecutivo en el que los de Germán suman. Y aunque la cosa sigue estando muy apretada por abajo un punto conseguido ante el tercer clasificado es más que un punto.