León, uno menos

León ya ha perdido las elecciones. No ha habido que esperar a que llegue la noche del 26 de junio y que, entonces, cada uno saque sus conclusiones. Ha bastado con su convocatoria, por primera vez por el rey (al no haber un presidente del gobierno en pleno ejercicio de sus funciones), disolviendo unas cámaras elegidas solo cuatro meses antes.

La única modificación que establece el decreto de convocatoria es que a León le corresponde un diputado menos, que gana Valencia. Tendrá cuatro, como Álava, Albacete, Burgos, Cáceres, Lérida, Lugo, Orense, La Rioja y Salamanca.

Muchos dirán, sobre todo tal como está el ambiente, que para lo que hacen… Tal vez, pero es la constatación evidente de la pérdida de población y, como consecuencia, de influencia.

Lejos quedan ya aquellas Cortes con los Gullón, Dato, García Prieto, Romero Robledo, Azcárate,… Diputados con influencia en la Restauración, jefes de filas, ministros y hasta presidentes del Gobierno. Solo el astorgano clan Gullón llegó a contar con cinco parlamentarios -tres diputados y dos senadores-, con lo que podía negociar por su cuenta como una facción más de los liberales.

Y también están ya olvidados los tiempos de la última restauración, la actual, con Martín Villa en los principales despachos del poder. O con Morano ejerciendo de diputado díscolo. Y más tarde el salto del diputado más joven y desconocido al liderazgo de la oposición y el gobierno, Rodríguez Zapatero.

Ahora es difícil que si uno pregunta sepan muchos responder a qué diputado conocen. Los dos estrenos, Ciudadanos y Podemos, casi no han tenido ni tiempo de ejercer.

¿Qué pasará ahora, con un escaño menos a elegir?

Lo más probable es que Ciudadanos pierda el acta que consiguió en diciembre. Se la quitó a los socialistas por poco más de mil votos.

Si se reproducen, con pocas diferencias, los resultados del 20-D, quizá con menos participación, no cabe pensar que haya más cambios. Claro que habrá que ver hasta donde llega la resistencia del PP en la provincia, las dudas sobre el PSOE de Pedro Sánchez y las consecuencias de una posible coalición entre Podemos e Izquierda Unida.

 

 

 

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