Las ocho formas de financiación perfectas para emprendedores

Uno de los aspectos que más importa a los emprendedores antes de iniciar ese negocio soñado es la financiación. Tener un colchón económico ante imprevistos y para invertir en lo necesario para tu negocio es clave para prosperar en los sectores más competitivos.

Por este motivo, se va a dedicar el artículo de hoy a conocer los principales tipos de financiación para emprendedores. En concreto, hablaremos de 8 formas de financiarse. ¡No te lo pierdas!

1. Préstamos

Una de las formas más comunes de financiación para emprendedores son los préstamos online y, también, una de las más sencillas. Su funcionamiento se puede resumir en los siguiente: se solicita una cantidad de dinero y se devuelve con una serie de intereses, en general, al mes.

Son operaciones de financiación a largo plazo por lo que la devolución del capital suele ser en pequeñas cantidades que hacen más fácil el emprendimiento, sobre todo, si se necesita una puesta en marcha del negocio cuanto antes.

En este tipo de financiación, se encuentran, también, las líneas ICO que son facilitadas por el Instituto de Crédito Oficial a través de los bancos y que no necesitan un aval. Sin embargo, es necesario justificar cierta facturación.

Cabe saber, además, que los intereses de los préstamos oscilan entre el 2% y el 5%, aunque depende del año y de la cuantía del préstamo.

2. Renting y leasing

Otra forma de financiación para emprendedores es el renting o el leasing. En España es demasiado común tener cosas en propiedad, cuando, realmente, existen grandes opciones de alquiler. Ya no sólo medios de transporte, sino también, equipos informáticos o elementos de oficina.

En este sentido, si empiezas a emprender, el renting y el leasing son grandes oportunidades para poner en marcha o sacar adelante el negocio. Además, estas opciones tienen como ventaja un mantenimiento de los equipos incluido en el precio de alquiler.

3. Pólizas de crédito

La póliza de crédito es aquella operación donde una entidad financiera pone en disposición del emprendedor una cantidad de dinero para disponer de ella cuando lo necesite.

De esta forma, el dinero permanece en una cuenta para ir gastándolo cuando convenga. Funciona de forma similar a una tarjeta de crédito y sobre la cantidad gastada se generará un interés.

Su principal ventaja es que no precisa un aval para solicitarlo. Sin embargo, es necesario contar con una facturación buena en el negocio.

4. Crowdfunding

Sin duda, puede que sea la forma de financiación más nueva de la lista, aunque solo sea por la nueva forma de llamarlo. El crowdfunding no es más que la financiación colectiva, es decir, la obtención de dinero mediante donaciones económicas, normalmente realizadas por la vía online, a tu proyecto.

Todas las aportaciones suelen ser a cambio de una recompensa, como, por ejemplo, el regalo del producto que vas a desarrollar. Si el proyecto es interesante, muchos apostarán por él y la financiación por crowdfunding será más exitosa.

5. Crédito comercial

Conocido también como descuento comercial, se puede considerar una financiación ideal para emprendedores al inicio de su negocio. Consiste en un aplazamiento que los proveedores conceden al cliente durante la compra de un producto o servicio.

Este acuerdo consiste en pagar a 60 días desde la compra con el fin de tener el tiempo suficiente para vender aquellos productos adquiridos al proveedor.

6. Business Angel

Una de las formas de financiación más llamativa para los emprendedores es, precisamente, el Business Angel. ¿Te suena? Se trata de personas con mucho capital que deciden invertir su dinero en empresas de nueva creación, justo en las primeras etapas, con el fin de obtener una participación de ellas.

El nombre le viene perfecto ya que son como ángeles caídos del cielo para los emprendedores, a los que muchas veces les cuesta dar con la mejor forma de financiación para su negocio.

Estos inversores no esperan demasiado año para observar que la inversión realizada tendrá un retorno y, en muchos casos, tienen un papel activo en la empresa, actuando como asesores. Muchos de ellos, deciden convertirse en socias a largo plazo.

En relación a este tipo de financiación, surgen las incubadoras o aceleradoras de empresas cuyo objetivo es muy similar al del Business Angel.

7. Crowdlending

Aún más novedoso que el crowdfunding, esta forma de financiación para emprendedores está protagonizado por empresas online que conectan a empresas con inversores que podrían estar interesado en prestar dinero a su negocio.

Este dinero se suele devolver con un interés y no tienen costes por cancelación anticipada del préstamo.

8. Factoring

Por último, los emprendedores también se pueden financiar mediante la anticipación de las facturas pendientes de cobro. A este proceso se le denomina factoring, pero, para poder realizar, la empresa o el negocio debe ser muy solvente.

En este sentido, la forma de actuar es obtener los derechos de cobro a cambio de un interés.