Las estaciones del Vía Crucis se convierten en farolas para iluminar las calles astorganas

Sergio González Todas las cofradías de Astorga se han reunido, este Martes Santo, para el ejercicio del Vía crucis en la Catedral, que ha estado sido presidido por el M.I. Blas Miguélez Vara. Ya desde las 18:15 horas empezaron a salir desde la Parroquia de Rectivía, Puerta de Rey, San Andrés, la Vera Cruz, Fátima y San Bartolomé, para concentrarse en la Plaza de España (Mayor) y dirigirse a la Catedral, convocando al pueblo.

La Pasión de Cristo ha sido compartida por todos los fieles pujado sus pasos hasta unir sus colores en una meditación colectiva en la Catedral, sobre la muerte y resurrección de Cristo. La Real Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de la Soledad ha sacado a la Farola, los Caballeros del Silencio de Nuestro Padre Jesús Nazareno a las Farolas de la Pasión, la Santa Cena al Beso de Judas, la  Entrada de Jesús en Jerusalén al Cristo del Amor y del Perdón Santa Vera Cruz al Atado a la Columna, las Damas de la Piedad a la Virgen de la Piedad, que data del S. XVI  y el Bendito Cristo a la Cruz del Sudario.

Una vez congregadas en la Catedral, todas las hermandades, cofradías y archicofradías han orado juntos por los momentos y sufrimientos vividos por Jesús desde que fue hecho prisionero hasta su muerte en la cruz y posterior resurrección.

Las Farolas de la Pasión han lucido como las estaciones o pasos del Vía Crucis para regresar a la parroquía de San Bartolomé llevando esa luz a las calles astorganas.

Al término de la procesión en la Iglesia de Rectivía se interpretó la cantata al Cristo del Amor y del Perdón, mientras el Cristo fue introducido en la Iglesia por sus braceros.