Las diputaciones de Soria, Cuenca y Teruel impulsarán la creación de una unidad de Inversión Territorial Integrada (ITI) contra la despoblación, al tiempo que pondrán una figura jurídico-administrativa para gestionarla. Así lo han acordado este lunes los presidentes de estas instituciones provinciales de las tres provincias, que se han reunido en Soria para suscribir la ‘Declaración de Soria sobre la Despoblación’, que se resume en seis medidas para paliar la sangría poblacional de estos tres territorios, a la que se quiere sumar el Señorío de Molina (Guadalajara) y la comarca Daroca-Calatayud. El presidente de la Diputación de Soria, Antonio Pardo, ha significado que a las tres provincias les unen “unas circunstancias especiales para pelear y buscar soluciones a la despoblación”. Por su parte, para el presidente de la Diputación de Cuenca, Benjamín Prieto, la despoblación es “un problema de Estado”, por lo que se buscará, entre otras cosas, el apoyo del Gobierno central a este proyecto que persigue recabar fondos europeos para estos territorios. Asimismo, la presidenta de la Diputación de Teruel, Carmen Pobo, ha sentenciado que el paso que se ha dado este lunes “no va a quedar en una declaración porque hay que trabajar para hacerlo todo en el menor tiempo posible”.
Así, la declaración suscrita recoge impulsar la creación de una ITI para el desarrollo de las tres provincias, incluida la continuidad del territorio en zonas Sierra Norte y Señorío de Molina en Guadalajara, y comarcas de Calatayud-Daroca en Zaragoza, por lo que se ha invitado a estas áreas a participar en el proyecto, con el objetivo de coordinarlo e impulsarlo en la anualidad 2015. La segunda de las medidas va orientada a encontrar el apoyo del Gobierno central y de las comunidades autónomas para que realicen las gestiones oportunas en el ámbito europeo, para el impulso de la ITI de cara al próximo periodo de inversión política de cohesión (2014-2020) en el ámbito de la Unión Europea. En este aspecto, se promoverán trabajos y estudios que permitan acreditar que la situación de estas zonas tiene indicadores “a veces peores” que otras zonas europeas que ya tienen esta consideración. El tercer punto de la declaración señala la creación de una figura jurídico-administrativa para gestionar la ITI con la representatividad de todos los que la integran e inicio de las accione de desarrollo a la hora de elaborar el proyecto. También se atenderá “la opinión de los agentes económicos” y se propondrá a la Administración del Estado y a las comunidades autónomas el estudio y aplicación de una fiscalidad diferenciadora con el territorio. Por último, el documento contempla la posibilidad de introducir criterios de discriminación positiva en el reparto de fondos comunitarios gestionados por los Grupos de Acción Local (GAL) en los territorios despoblados. A la reunión, que se ha prolongado por un periodo de más de dos horas, han asistido los tres portavoces de los grupos políticos que componen la Diputación de Soria: Ascensión Pérez (PP), Ángel Núñez (PSOE) y José Antonio de Miguel Nieto (PPSO); así como el diputado provincial responsable del Área de Desarrollo Económico, Martín Casado, y el diputado provincial de Teruel, Luis Carlos Marquesán.
Pardo ha señalado la “importancia” de este documento final como hoja de ruta para trabajar en los próximos meses tras la reunión celebrada este lunes fruto de la moción aprobada por la institución provincial soriana hace ahora dos meses en la que se hizo “especial hincapié” en la toma de medidas contra la despoblación y a trabajar de manera conjunta con aquellas provincias con índices similares. Carmen Pobo ha destacado que tras esta reunión las diputaciones “se han puesto los deberes para empezar a ver resultados en un espacio de tiempo”. “Queda claro una vez más que la preocupación es común en un tema como la despoblación que no es un problema de tres presidentes, sino que es un problema de todos”, ha añadido. Por último, Benjamín Prieto ha insistido en definir el problema “como un problema de Estado” y ha considerado que el encuentro ha sido “muy positivo, puesto que se han llegado a unas conclusiones concretas y concisas”.