La pájara de Gallardón

Aquí desde donde se está produciendo esta semana el hecho histórico del Mundial de Ciclismo, todavía recibimos con inquietud, y estupor el abandono del Ministro de Justicia.  La ley debería prohibir dimisiones políticas, por causas que no tengan a la salud o el incumplimiento de la ley como justificación, (aunque si nos agarramos a la segunda excusa habría varios dimisionarios…). Un representante público que se ha presentado a las elecciones y que ha alcanzado el puesto de Ministro, tendría que estar obligado a finalizar el mandato. Ni la coherencia que se cita desde todos los ámbitos me convence. Perdió su cruzada, del aborto es cierto, pero en la justicia había otras cruzadas a las que tenía que haber dado preferencia, si pretendía, como dijo, renovarlo casi todo.

El experto Gallardón, defendió sus ideas, pero se equivocó y así se lo espetó el presidente de su propio partido. Se retira el proyecto de la Ley del aborto que abanderó, y como no salieron las cosas como quería, ¡adiós muy buenas!. Gallardón se va y deja una de las carteras más importantes y necesitadas de un cambio que verdaderamente suponga la modernización del sistema, atascado, carente de medios, de personal y poco evolucionado en las formas.

Gallardón no sólo era el Ministro del aborto. A Gallardón se le encomendaron varios cambios como la polémica reforma del código penal, las tasas judiciales que por primera vez pusieron de acuerdo a todos los actores de la justicia, la reforma del consejo general del poder judicial, “metiendo al zorro a cuidar de las gallinas”…  y entonces, no se fue. Ahora sí se va.  Se va el veterano Gallardón, y su decisión es aplaudida por muchos, muchos profesionales del ramo y colectivos en contra de sus pretensiones. Otros lo sienten con la misma intensidad. Gallardón el Ministro que agradaba a la izquierda, se va por no conseguir sacar adelante una medida muy, pero que muy situada a la derecha.

La justicia tendrá que vérselas con su sucesor. ¿Qué encomiendas tendrá Don Rafael, más técnico que político, según dicen los que lo conocen?.  ¿Y en el partido judicial de Ponferrada? ¿qué nos tocará ahora?, ¿qué les tocará a los que vayan a pedir justicia? ¿y a los profesionales de la judicatura?. ¿Y la nueva oficina judicial? ¿y el nuevo edificio que se ha construido y que espera la recepción de las obras, finalizadas ya, hace meses?. Alguien vendrá que bueno me hará.

¡Mejor no!, que no hagan bueno a Gallardón con la filosofía de ese dicho popular, por que entonces habrá que volver a ponerse a temblar. ¡Que el cambio venga ya bien de origen!.

“La pájara” de Gallardón se produce en pleno Mundial de ciclismo, con muchos bercianos preguntándose por la repercusión del Mundial. A algunos les molesta que los beneficios, vayan a parar –según ellos- solo al sector del turismo y la hostelería. ¿Y por qué les molesta?. La hostelería y el turismo son sectores que también mueven la economía de la comarca, y para eso están, son también negocio, y hay que sacarlo adelante. Yo estoy encantada de que les vaya bien, y de que repercuta el gran acontecimiento en empresas del Bierzo, que no saldrán de los apuros, pero que sí agradecerán el empujón del Mundial… ó acaso ¿alguien había pensado que iban a venir las delegaciones de los países, Suiza, Alemania, Francia, Australia, Gran Bretaña, Nueva Zelanda….a tirar billetes desde las azoteas de los hoteles?. Yo creo que el debate no tiene más cuerda. Al final el balance de las cuentas municipales y lo que ha supuesto la organización, junto con “el poso” que deje la prueba planetaria, serán los mejores argumentos. Tiempo.