Astures y Romanos

La música del Imperio Romano inunda el Teatro Gullón

Orpheus interpretó este domingo un programa inspirado en lo que se cree ahora que es la música del Imperio Romano, pues no se conserva documentación sobre este periodo histórico

Una quincena de músicos presentaron este domingo en el Teatro gullón la música del Imperio Romano. La agrupación musical Orpheus ofreció un concierto en el espacio público sobre la música romana, dentro de la programación de Astures y Romanos 2019. “Aunque no se conserva documentación sobre los estilos musicales en la Roma antigua, sí que hay indicios sobre los instrumentos utilizados y lo que podría haber sido la música”, explicó Pedro González, presentador de la gala.

Los músicos de Orpheus interpretaron música de películas basadas en el Imperio Romano, así como música española del Levante utilizada para las fiestas de Moros y Cristianos. “La música occidental se fundamenta en un sistema de notas que toma siempre como referencia una de ellas, llamada tónica y por eso a este sistema se le llama tonal. Cada intervalo está marcado por una distancia y las escalas cumplen siempre la misma progresión de distancia entre cada una de ellas para formar los modos mayores -más alegres– y los modos menores -más melancólicos tristes-. Sin embargo, en la Grecia antigua se utilizaba un sistema modal compuesto por siete modos: jónico, dórico, frigio, lidio, mixolidio, eólico y locrio. En este sistema, ninguno de los modos comparte la misma estructura. En la actualidad, los compositores buscan estos modos griegos para hacer que sus composiciones parezcan antiguas”.

Orpheus interpretó un concierto con instrumentos modernos inspirado en la Roma imperial con obras de bandas sonoras como Gladiator, ÉxodoBen-Hur. También interpretaron marchas moras y cristianas en las que la percusión y las llamadas de las trompetas cobran especial relevancia, como así lo hacían en la antigüedad. “Durante los siglos I y II d.C. la cultura y la música fueron parte importante en el Imperio pues se ofrecía como entretenimiento a la plebe y era parte de la educación romana. El emperador Nerón llegó incluso a tener aspiraciones musicales, con el declive del imperio cesó la producción musical y no ha dejado apenas rastro”.

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