La Junta de Castilla y León se marca el año 2024 como límite para que toda la población de la Comunidad cuente con acceso a conexión de 30 megas, ampliando la velocidad hasta los 100 megas para el año 2027 para el cien por cien de los habitantes, tal y como figura en el borrador del Plan Sectorial del Hábitat conocido por Ical.
Este es uno de los retos más destacados de un documento, dividido en seis ejes de actuación, que plantea doce acciones marco para lograr objetivos como la reducción de las emisiones por habitante en un 12 por ciento en 2027, el incremento del porcentaje de empleos femeninos y de jóvenes en un 50 por ciento en ese mismo año; que la adecuación de la oferta y la demanda formativa y de empleo supere el 90 por ciento dentro de seis años, y que los edificios públicos rehabilitados energéticamente alcancen el 15 por ciento en la Comunidad en 2027.
Todo ello como retos tangibles dentro del gran objetivo que se marca el Plan Sectorial del Hábitat de Castilla y León, que es el impulso de un macro sector para marcar las líneas de relación público-privadas, potenciar la producción, la construcción y el consumo responsable, sostenible y circular, así como hacer ver a la sociedad castellana y leonesa la necesidad de mantener estas actividades económicas como generadoras de bienestar, equilibrio y sostenibilidad.
Se define así el hábitat como “un bien común a respetar y cuidar, un valor cultural intrínseco a la Comunidad y un futuro de sostenibilidad y bienestar”, al que el Gobierno autonómico da un enfoque “multidisciplinar” por abordarse no solo desde el punto de vista económico, sino también “desde el social y el ambiental” a través de un proceso para desarrollar la estructura del plan.
Y es que el hábitat incluye grandes sectores para Castilla y León como el agroalimentario, el sociosanitario, el cultural, el relativo a la industria de la automoción y el de la energía.
Así, el desarrollo de las acciones, proyectos e iniciativas comunes que contempla el Plan Sectorial del Hábitat de Castilla y León para los sectores de cada una de las interrelaciones dobles, triples y cuádruples “dará lugar a avances de gran riqueza para la economía de Castilla y León”, según el documento.
Reducción de emisiones
La Junta estructura su Plan Sectorial del Hábitat en torno a seis ejes que se abordan mediante doce acciones marco, que tienen como misión “visibilizar las necesidades del sector y precisar sus oportunidades para las próximas décadas, consolidar un modelo de gobernanza participativo, operativizar los recursos disponibles presentes y futuros, y dinamizar a toda la cadena de valor”.
El primero de los ejes, referente a la transición ecológica, trata de reducir la huella de carbono del sector del hábitat y rehabilitar y conservar el entorno natural. Sus objetivos incluyen la planificación de la sostenibilidad en el desarrollo del sector del hábitat, la reducción y compensación de las emisiones de CO2, el incremento de la disponibilidad de materias primas endógenas y de la sostenibilidad en la movilidad urbana.
Para ello se marcan como metas la reducción de las emisiones por habitante en un 5 por ciento en 2024 y en un 12 por ciento en 2027. También se pretende aumentar los metros cúbicos de madera aprovechados en cortas anuales hasta los 3,2 milímetros cúbicos en 2024 y hasta los 3,8 en 2027. Se plantea, asimismo, que el porcentaje acumulado de edificios públicos rehabilitados energéticamente sea del tres por ciento en 2024 y del 15 por ciento en 2027, y que el incremento de la tasa anual de rehabilitación llegue al 30 por ciento dentro de tres años y al cien por cien en 2027.
Se espera asimismo contar con 2.900 puntos de carga en 2024 y 5.500 en 2027 para lograr “una movilidad sostenible”, y llegar a las 30.000 hectáreas de superficie forestada acumulada para el incremento de sumideros de carbono, que alcanzarían las 100.000 hectáreas en 2027. Por último, se contempla un aumento de la recogida selectiva de residuos respecto a 2021 del 15 por ciento a tres años y del 50 por ciento en el horizonte de 2027.
Todo ello a través de la puesta en marcha de una Estrategia Regional de Movilidad Sostenible que incluya “acciones, infraestructuras y políticas que garanticen la cohesión territorial, favorezcan la igualdad de oportunidades y conecten a Castilla y León con los territorios circundantes”.
Alineado con este objetivo, también se enmarca el despliegue de un sistema de gobernanza climática coordinada con todas las Administraciones, la puesta en marcha de acciones de aprovechamiento y valorización de los recursos endógenos de la Comunidad, la renaturalización de los entornos rurales y urbanos, y la transformación del parque edificado de la Comunidad con criterios de sostenibilidad y accesibilidad.
Transición digital y cohesión territorial
En cuanto al segundo eje, relativo a la transición digital, pretende aprovechar las herramientas digitales para el impulso y la consolidación del Sector del Hábitat a través de la digitalización de todos los servicios de la Administración para su mejora y agilidad, el aumento de la competitividad, la tecnificación y las capacidades digitales, y garantizar la conectividad y reducir la brecha entre lo rural y lo urbano, alcanzando al cien por cien de la población con acceso a conexión de 30 megas en 2024, aumentando esta última a 100 megas para todos los habitantes de Castilla y León en 2027.
El tercer eje pretende desarrollar la Economía Circular desde una perspectiva territorial mediante la activación del territorio, a través del aumento de la actividad del sector, el desarrollo de iniciativas tractoras y proyectos piloto, y el refuerzo de los polos de desarrollo rural; y con la identificación del Hábitat de Castilla y León con los valores de calidad de vida, bienestar y sostenibilidad propios de la economía circular.
Creación de la marca ‘Hábitat de Castilla y León’
El reforzamiento empresarial es el cuarto eje del Plan Sectorial del Hábitat de la Junta, que busca la mejora de la competitividad empresarial desde la capacitación, la formación profesional, la industrialización, la innovación y la potenciación de relaciones entre agentes. Para ello, el Gobierno autonómico pretende reforzar el tejido empresarial del sector, así como su I+D+i y la capacitación profesional de las personas que conforman el sector aumentando el porcentaje de adecuación entre la oferta y la demanda formativa en FP y de empleo por encima del 90 por ciento en 2024.
La creación de una imagen de marca de calidad, bajo el nombre ‘Hábitat de Castilla y León’, se constituye como el quinto eje del plan, incluyendo el monitoreo y análisis para la gestión de datos e informes del sector, la proyección y participación activa del sector del hábitat de la Comunidad a nivel nacional e internacional, y la puesta en marcha de un programa de valor compartido de las empresas del sector en relación al capital natural y social de su entorno territorial.
Por último, el eje relativo a la igualdad de género y oportunidades, bajo el prisma de visibilizar el rol de la mujer y los jóvenes en el Sector del Hábitat, favoreciendo su integración, se marca como objetivo la renovación del sector mediante la mejora de la inclusión y la igualdad con un aumento del porcentaje de incremento de los empleos femeninos y de jóvenes menores de 30 años de entre el 20 y el 30 por ciento en 2024 y del 50 por ciento en 2027.