La Junta no contempla adelantar el fin de las restricciones contra el COVID-19

El presidente de la Junta asegura que las restricciones se “relajarán” cuando finalice la vacunación contra el COVID

La Junta de Castilla y León no contempla adelantar el fin de la prórroga de las medidas restrictivas contra el COVID-19 que se refiere a la limitación de aforos y horarios en la hostelería, locales de ocio nocturno y actividades ligadas a las fiestas patronales, acordada la pasada semana al próximo 13 de septiembre.

Así lo aseguró este martes en Burgos el vicepresidente, portavoz y consejero de Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior, Francisco Igea, a preguntas de los periodistas antes de la firma con los rectores de las universidades públicas de la Comunidad de un convenio de colaboración en materia de reto demográfico.

“Si las cosas van bien dentro de quince días nos volveremos a reunir y volveremos a tomar una decisión”, dijo, al tiempo que reconoció: “Le aseguro una cosa: nadie tiene más interés en la Comunidad que este que les habla de anunciar el fin de las restricciones”. Sin embargo, recordó que “este verano se ha vivido una ola importante, situaciones en periodos festivos con rebrotes de incidencia en localidades de la Comunidad este verano” por lo que consideró que “dar un mensaje equivocado es una cosa que podría provocar un problema”.

“La vacuna está funcionando muy bien pero con cifras de incidencia tan grandes como las que hemos tenido se ha visto que a pesar de que funciona muy bien no elimina completamente el problema”, relató Igea. “Nuestro objetivo es eliminar las restricciones lo antes posible y mantener la prudencia”, exclamó. “Estamos todos muy cansados, yo también, pero nuestra obligación es mantener la prudencia”, insistió.

Asimismo, destacó que “las restricciones no están afectando en este momento a la actividad ordinaria de los sectores que sufren las restricciones, salvo sectores muy concretos que tienen que recibir las ayudas correspondientes y con el 90 por ciento de la actividad hemos sido capaces de controlar un poco la incidencia importante”.

Vacunación

El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, aseguró este martes en Valladolid que las restricciones impuestas por el Gobierno autonómico para frenar la propagación del coronavirus se “relajará” cuando finalice el proceso de vacunación contra el COVID al recordar que el virus sigue “entre nosotros” y continúan los contagios. En todo caso, consideró que las medidas en la Comunidad son “equilibradas” y buscan conjugar la garantía sanitaria y la recuperación económica. Hasta el punto que señaló que las restricciones en Castilla y León son “más flexibles” que en otros territorios del país, tal y como han podido comprobar los castellanos y leoneses que se hayan movido las últimas semanas por España.

En una rueda de prensa para analizar el curso político que arranca, Fernández Mañueco señaló que la Junta está en una “intensa” fase de trabajo para “superar” la pandemia. No en vano, recordó que ya se ha vacunado al 90 por ciento de la población vacunable, los mayores de doce años, al menos con una dosis. Además, señaló que ya están citados todos esos ciudadanos, tanto para recibir el primer pinchazo como para completar la pauta. Pese a reconocer la baja la incidencia del COVID y que los datos de hospitalizaciones invitan al “optimismo”, manifestó, según recogió Ical, que no hay que bajar la guardia por que el virus sigue presente.

Preguntado por si teme que el presidente del Gobierno levante las restricciones para hacer frente a la pandemia, de forma unilateral, como cuando decidió suprimir la obligación de llevar mascarillas en espacios abiertos al aire, Fernández Mañueco sentenció que las comunidades autónomas tienen sus competencias. “De Sánchez podemos esperar muchas cosas pero los gobiernos autonómicos son los que deben tomar sus propias decisiones”, zanjó.

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