El consejero de Sanidad, Antonio María Sáez, ha informado a las juntas provinciales de la AECC sobre la planificación de la radioterapia en Castilla y León. En la actualidad, el nivel de calidad de los tratamientos en la Comunidad es adecuado. La tasa de aceleradores lineales en los hospitales públicos de Sacyl es de 4,45 por millón de habitantes, mientras que la media española es de 3,36.
Consultas a distintos organismos
Ante las controversias y reivindicaciones planteadas, la Consejería de Sanidad ha adoptado diversas iniciativas. Así, se ha consultado al Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad sobre la vigencia de los criterios de planificación aprobados por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud. La respuesta es clara: esos criterios continúan vigentes, señalando expresamente que debería tratarse de solventar la atención a los pacientes sin implementar una unidad en la provincia de Ávila, reiterando que “se debe tender a no atomizar excesivamente la provisión de la prestación, pues puede ir en detrimento de la calidad y la seguridad del paciente”.
Además, se ha consultado a los profesionales de Castilla y León, para lo que se ha creado un Comité Asesor en Oncología Radioterápica (O.R.) integrado por los cinco jefes de Servicio de O.R. y por los cinco jefes de Servicio de Radiofísica. Este grupo ha planteado diversas iniciativas que han sido asumidas por la Consejería, como la elaboración de un Plan Estratégico de O. R. 2016-2020 que parta de la realización de un estudio de necesidades para definir, con la metodología más avanzada, las necesidades de futuro que deberán ser atendidas al 100 %.
Entretanto, “sobre el dimensionamiento de los servicios de O.R.” el Grupo se expresa a favor del “mantenimiento y potenciación de las instalaciones actuales”; considera que la posible atomización de los servicios supondría “una seria cortapisa a la introducción de nuevos avances y una dificultad insalvable para garantizar la equidad en el acceso a las nuevas tecnologías”; y concluye que “una mayor dispersión de los recursos existentes resultaría aún más perjudicial para la oncología radioterápica. Supondría mayores costes y una pérdida respecto a la efectividad y eficiencia actual”.
La Consejería de Sanidad también ha consultado a la Asociación Castellano Leonesa de Oncología Médica (ACLO). Su presidente señala que la ACLO “aboga por un plan de regionalización de recursos oncológicos mediante un proceso de concentración (…) que obedece a criterios de aseguramiento de la calidad asistencial; para determinados procedimientos médicos y quirúrgicos, los mejores resultados se asocian al volumen de actividad de hospitales y profesionales”. Entre estos procedimientos incluye “Radioterapia: radioterapia de intensidad modulada (IMRT), radiocirugía, tomoterapia, braquiterapia, etc”.
Consultado también el Consejo de Colegios de Médicos de Castilla y León, su presidente valora positivamente la creación del Comité Asesor y considera que sus propuestas contribuirán a mejorar la atención a los pacientes con cáncer. Para ello, considera que algunos recursos requieren “un grado de concentración necesario para garantizar un número de casos adecuados que garantice los mejores resultados para nuestros pacientes”, tal como señalan distintas sociedades científicas de varias especialidades y documentos de consenso.
Por su parte, el Comité Asesor en Radioterapia aconseja realizar un estudio sobre necesidades que permita planificar, con los criterios técnicos más actuales y las previsiones demográficas, y cuantificar las necesidades futuras en función del tipo de tumores. Asimismo, propone mantener y potenciar los actuales servicios, evitando que la apertura de nuevas unidades suponga una pérdida de la efectividad actual de los tratamientos y “una dificultad insalvable para garantizar la equidad en el acceso a las nuevas tecnologías”.
Actualización tecnológica
La actualización tecnológica es muy importante en radioterapia; cada cuatro o cinco años se incorporan nuevos equipos con prestaciones más precisas. En la actualidad existen equipos que permiten reducir los tratamientos de cáncer de mama o de próstata de 22 a poco más de seis sesiones. En la medida en que la vida media de un acelerador lineal es de 10 años, la creación de un Servicio de O.R. con un solo acelerador en las provincias con menos población supondría que hasta 2027 ó 2028 no podría renovarse la tecnología y los pacientes con cáncer no podrían beneficiarse de las nuevas prestaciones.
La innovación tecnológica apunta a la denominada hipofragmentación (la misma intensidad concentrada en menos sesiones) y al desarrollo de la radioterapia intraoperatoria. La renovación tecnológica es posible en los centros con mayor número de unidades que pueden sustituirse progresivamente.
La Consejería de Sanidad asume la propuesta del Comité Asesor reforzada por las recomendaciones del Ministerio, de la Sociedad de Oncología Médica de Castilla y León y del consejo de Colegios de Médicos: garantizar los tratamientos más actualizados de forma que se garantice la equidad a todos los pacientes; y mejorar el transporte sanitario, personalizarlo en algunos casos y eliminarlo en otros, financiando la estancia hotelera mientras dure el tratamiento a los pacientes cuyos desplazamientos sean más dificultosos o puedan añadir incomodidad a su propia enfermedad.
En la reunión mantenida con las juntas provinciales de la AECC, Sáez ha resumido también algunas de las tendencias existentes en los países europeos en la atención radioterápica. Así, los países escandinavos son ejemplo de los sistemas de radioterapia más avanzados y de mayor calidad. El modelo escandinavo es el de instalaciones de tratamiento de tamaño mediano grande; los pacientes geográficamente remotos son alojados en un hotel en la ubicación del centro de tratamiento.
En Suecia, con nueve millones de habitantes, existen 17 servicios de O.R, y solamente cuatro de ellos disponen de menos de cuatro aceleradores lineales; Noruega, con 4,5 millones de habitantes, dispone de seis centros de O.R. con 24 aceleradores; Dinamarca, con cinco millones de habitantes, dispone de seis servicios de O.R., todos con un mínimo de cuatro aceleradores lineales. En los Países Bajos, con 16,5 millones de habitantes, se recomienda que la estructura básica de un servicio de O.R. incluya cuatro aceleradores para tratar a 2.000 pacientes. Se autorizan centros con sólo dos aceleradores, siempre y cuando estén vinculados a un servicio mayor.
La regulación francesa es más estricta. El Decreto 388-2007 regula la creación de servicios de radioterapia, exigiendo la instalación de al menos dos aceleradores lineales y el tratamiento de al menos 600 pacientes al año. El Libro Blanco de la Radioterapia en Francia recoge esta regulación. Reconoce que existen todavía un 19 % de centros con un solo acelerador. A estos centros se les ha exigido que, hasta su crecimiento o desaparición, se vinculen a otros centros mayores.