Economía

La Junta detecta un “déficit comercial” en las comarcas astorganas y bañezanas

El comercio se concentra en unos pocos municipios, mientras que los pueblos no cuentan con establecimientos para realizar las compras más básicas
Castrillo de Cabrera no cuenta con ningún establecimiento para realizar las compras básicas.
Imagen de Castrillo de Cabrera.

Astorga presenta uno de los mapas con mayor déficit de establecimientos dedicados a la venta de productos cotidianos, según el informe presentado este lunes por la consejera de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo. En total, son 24 zonas en toda Castilla y León, lo que suponen 1.251 municipios. En 733 localidades no existe ningún local de este tipo y en 228 sus vecinos sólo disponen de un establecimiento para adquirir víveres.

En la zona clasificada como sur de León, Astorga-La Bañeza, la Junta observa un desequilibrio motivado por la existencia de municipios que casi monopolizan la existencia de supermercados en sus respectivos territorios. Es el caso de municipios como Castrillo de Cabrera, que no cuentan con ningún establecimiento, o municipios como los de Truchas y Quintana y Congosto, que solo cuentan con un establecimiento comercial de estas características.

Mapa de las zonas con déficit comercial. / Ical
Subvenciones

El Gobierno regional subvencionará hasta el 80 por ciento del coste de la implantación de comercios para la venta productos de primera necesidad en 24 zonas del medio rural con problemas de abastecimiento y en las que hay 733 localidades donde no existe ningún local y 228 donde sus vecinos solo disponen de un establecimiento.

A partir de 2018, se impulsará un plan de abastecimiento para las zonas rurales con mayores necesidades comerciales con el objetivo último de “fijar población y generar actividad económica y empleo”, según especifió la consejera. Del Olmo recordó que este programa se enmarca en la III Estrategia de Comercio de Castilla y León 2016-2019, y contempla una partida de 400.000 euros para subvenciones de hasta el 80 por ciento para la puesta en marcha de comercios en esas zonas desabastecidas.

La consejera también anunció que están negociando con todas las cadenas de supermercados la implantación de franquicias en estas zonas dentro de sus estrategias de responsabilidad social corporativa, porque “no todo es rentabilidad”.

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