S.Gallo / ICAL El jefe del Servicio de Agricultura de la Delegación Territorial de la Junta en León, Fidentino Reyero, anunció hoy que el Ejecutivo autonómico publicará esta próxima semana la orden de ayudas a la replantación de frutales arrancados por el fuego bacteriano, que estará dotada con 120.000 euros. Así lo dijo durante la inauguración de la V Feria del Pimiento del Bierzo que se celebra este domingo en la localidad de Carracedelo.
Estas ayudas, según apuntó Reyero, estarán destinadas a la compra de los árboles frutales y la intención de la Junta es hacer “un esfuerzo importante” con los servicios técnicos para que estas ayudas lleguen “absolutamente a todos” dado que la fruticultura es un sector “estratégico” en la comarca del Bierzo. “Nos vamos a volcar para que todos los que quieran acogerse a ellas puedan percibirlas”, aseguró.
Con la campaña de fuego bacteriano prácticamente finalizada, Reyero reconoció que en líneas generales ha resultado “bastante tranquila” porque las condiciones climatológicas que se han dado en el presente ejercicio han permitido que la infección no se haya propagado, como sí ha ocurrido en años anteriores.
El ‘fuego bacteriano’ o ‘chamuscado’ es una enfermedad provocada por la bacteria erwinia amylovora, que afecta a los frutales de pepita, en espinos, cotoneaster, espino de fuego y serbal y mostajos. Es especialmente dañina en el caso del peral ya que el frutal muestra un aspecto totalmente ennegrecido como quemado por el fuego. En el caso del manzano y el membrillero produce el mismo efecto, aunque con menor incidencia.
Finalmente, ataca, especialmente, a las ramas jóvenes y a los brotes, que aparecen como quemados, sobre todo, durante el verano. Posteriormente, se forman chancros en las ramas, que produce una viscosidad bacteriana amarilla o blanca. Los chancros en el tronco o en el cuello de la raíz ocasionan la muerte de la planta completa.