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La consejera de Sanidad, Verónica Casado, anunció hoy la compra de 250.000 test de anticuerpos del Covid-19 a una empresa china por valor de algo más de 1,6 millones de euros. Además, confirmó que la mitad de los test adquiridos, 125.000 junto con 56.600 batas de protección y 28.350 buzos, llegó esta madrugada a un aeropuerto de Madrid.
Casado, durante su comparecencia diaria para informar sobre la incidencia de la pandemia del coronavirus en Castilla y León, también explicó que la compra cuenta con el visto bueno de la Agencia Española del Medicamento y fue autorizada por la Secretaría de la Consejería de Sanidad.
En este sentido, la consejera recalcó que su departamento siempre ha extremado la prudencia en la compra de este tipo de material para evitar el “mercadeo”, y recalcó que la empresa a la que han adquirido el material, Zuhai Livzon Diagnostics Inc., figura en la lista del Gobierno chino de empresas autorizadas y cuenta con certificado ISO.
Además, según se confirmó desde la Consejería de Sanidad, estos 125.000 test rápidos IgG/IgM, y constituye una de las primeras entregas de las que llegarán a Castilla y León. La semana próxima está prevista la llegada de otros 125.000 test y habrá más en fechas sucesivas. Estos test se distribuirán por todas las áreas de salud de la Comunidad y se utilizarán para comprobar la presencia o no de anticuerpos de Covid-19 en pacientes de los servicios de Atención Primaria y Atención Hospitalaria, profesionales sanitarios y trabajadores y usuarios de las residencias socio-sanitarias.
Los test rápidos permiten la obtención de resultados en unos 15 minutos. Y su transporte y uso es sencillo, por lo que pueden ser realizados por personal no entrenado y en cualquier lugar. Su funcionamiento se basa no en la detección directa del virus, sino en mostrar la respuesta de anticuerpos (inmunidad) que presenta el paciente frente a la infección. Tanto si es una infección aguda (lgM), como si es una infección pasada (lgG).
No obstante, desde la Consejería de Sanidad se advierte que la sensibilidad de estos test de detección de anticuerpos no es tan alta como la de las pruebas PCR -pruebas moleculares de detección genética del virus con toma de exudado naso faríngeo-, debido a que la respuesta de anticuerpos del organismo puede ser variable en el curso de la enfermedad, sobre todo en pacientes inmunodeprimidos. Y, por lo tanto, son una prueba complementaria a la realización de PCR. Siendo fundamental saber elegir adecuadamente el test a aplicar en las diferentes fases de la infección. Castilla y León tiene actualmente una tasa media de realización de unas 2.334 PCR por cada 100.000 habitantes, por encima de la media nacional situada en 2.000 PCR por cada 100.000 habitantes.
Las pruebas rápidas tienen una especificidad muy alta, por lo que cuando dan positivo no es necesario realizar posteriormente una PCR. Sin embargo, una persona puede estar enferma y dar negativo por no tener una carga de anticuerpos suficiente como para que sea detectada por estos test rápidos, produciéndose así un ‘falso negativo’; siendo en estos casos necesaria la realización de una PCR de apoyo para confirmar ese resultado.
No obstante, desde Sanidad se reconoce que los test rápidos son una gran ayuda en la lucha contra la pandemia de coronavirus ya que reducen, de manera considerable, la necesidad de las PCR. Pruebas estas últimas que requieren de personas especializadas para su análisis y cuyos resultados tardan más en obtenerse.
Estudio seroprevalencia
Por otra parte, la consejera dudó que el próximo lunes, día 27 de abril, pueda iniciarse el estudio de seroprevalencia del Ministerio de Sanidad y en el que está previsto que participen 10.140 personas de Castilla y León. La muestra diseñada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) incluye a un total de 960 en Soria; 1.020 personas en Ávila, Palencia, Segovia y Zamora; 1.200 en Burgos y Salamanca; 1.320 en León, y 1.380 en Valladolid.
Según explicó, todavía no se han recibido los kits para realizar un estudio de mucha envergadura que incluye muestras de anticuerpo y sangre. También reconoció que su departamento aún no tiene “información clara” para organizar las citas.
Además, en la rueda de prensa, Casado consideró acertada la decisión de Andalucía de establecer obligatoria la vacuna de la gripe para las personas mayores, pero recordó que una decisión de salud pública de este calado se debe tomar a nivel estatal.
En su intervención Casado también lamentó el fallecimiento de una celadora de 57 años del Hospital de Segovia, y reconoció que con ella ya son cuatro los profesionales sanitarios fallecidos por Covid-19 en Castilla y León, ya que a esta lista hay que sumar el fallecimiento de tres médicos de familia, dos en Salamanca y uno en León.
Por último, también se refirió al hospital de campaña instalado en la Feria de Valladolid y apuntó que una vez que se dé el alta a los cinco pacientes que permanecen ingresados, se mantendrá en “hibernación” hasta finales de mayo.
