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Con el aforo completo, la Banda Municipal de Música de Astorga ofreció la noche de este sábado un concierto completo y diferente con motivo de la celebración de Santa Cecilia, patrona de los músicos. Además, a mitad de concierto, el trompetista José Juidia San Martín, que cumplió 25 años con la Banda, regaló al público una pieza de Arturo Sandoval, acompañado por sus compañeros.
Como ya es tradición, la Banda ofreció en el auditorio del IES de Astorga su particular homenaje a la patrona de los músicos, Santa Cecilia. La agrupación arrancó el programa con el pasodoble de concierto António Nogueira, de Ilídio Costa. Esta obra de origen portugués es una interesante pieza, diferente a los pasodobles españones con una complejidad técnica que la Banda supo afrontar con maestría. En concreto el solo de trompeta interpretado por Pablo López, que destaca por su preciosa melodía.
La Banda Municipal continuó con la obertura Mais Alto e Mais Além, de Alfonso Alves. Una pieza portuguesa, nueva en el repertorio musical de la agrupación, de una gran calidad armónica y que saca partido a todos los instrumentos que conforman una banda sinfónica como la astorgana. Pasajes rápidos se suceden a los pasajes más tranquilos, pero no por ello exentos de dificultad, que hicieron las delicias del público asistente.
Este año, y como es tradición, se homenajeó a los músicos que llevan 15, 25 o 50 años en la Banda. Este año fue el turno del trompetista José Juidia San Martín, quien, además de recibir el pin conmemorativo por sus 25 años, interpretó arropado por la Banda Municipal la compleja pieza de carácter latino A mis abuelos, de Arturo Sandoval.
El programa continuó con una selección del musical Man of La Mancha, de Mitch Leigh. Inspirado en el libro de Miguel de Cervantes Don Quijote de la Mancha, fue un éxito en todos los teatros del mundo y que en España interpretaron José Sacristán y Paloma San Basilio. Una pieza que recorre, en la mente de su compositor los parajes descritos por Cervantes en su obra magna. Una obra en la que no faltan el propio Don Quijote y su amada Dulcinea interpretada musicalmente por el grupo de flautas.
La Banda finalizó el concierto a Santa Cecilia con Ross Roy, una obertura del compositor holandés Jacob de Haan. La obra fue una petición para la Banda Sinfónica de Brisbane (Australia). ‘Ross Roy’ es una villa monumental del siglo XIX tardío donde se erige desde 1945 la Universidad Luterana Saint Peters. En su composición, De Haan ve a ‘Ross Roy’ como una metáfora para los años de escolarización, cuando se forma la personalidad de cada uno.
Uno de los momentos más emotivos, fue la interpretación de los más jóvenes de la Escuela Municipal de Música de Astorga, los niños y niñas de la Escolanía del Himno a Santa Cecilia. Una obra que corearon algunos de los músicos de la Banda y el público presente. A la cita no faltaron la concejala de Música, Marcelina Gómez, y el primer teniente de alcalde, Pablo Peyuca.
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