La acusación popular sostuvo este jueves que “queda claro que no ha existido violencia” y que lo que se produce es una “agresión por intimidación” a la menor de 15 años que denunció haber sufrido agresiones sexuales por parte de tres exjugadores de la Arandina Club de Fútbol el pasado 26 de noviembre en el piso que compartían en la capital ribereña.
El abogado de la acusación popular, ejercida por la asociación Clara Campoamor, Luis Antonio Calvo, precisó que “todavía no tiene calificación jurídica” y que “es lo que se está determinando” en la fase de instrucción del caso de presuntas agresiones sexuales a la menor.
“Sí que queda claro que no ha existido violencia. Entendemos que probablemente ha sido intimidación en la forma de actuar pero es lo que queda por acreditar desde el punto de vista de la acusación. En principio, en mi opinión, se produce agresión por intimidación, no por violencia”, declaró a los medios de comunicación a la salida del Palacio de Justicia de Aranda, tras la nueva exploración de la menor denunciante ante la juez y la fiscal que tuvo una duración de una media hora.
Según expuso el letrado, “no se está hablando de tocamientos”. “Ha sido mucho más grave que tocamientos; los hechos no son meros tocamientos porque si solo fueran meros tocamientos no se está en prisión provisional”, manifestó, y agregó que “ahí lo que hay son unos abusos sexuales mucho más graves que unos meros tocamientos” aunque, dijo, “ellos lo niegan”.
Además, en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Aranda de Duero (Burgos) prestaron declaración cuatro testigos más: el padre de la adolescente, el tío y una prima, así como la psicóloga que está atendiendo a la joven durante toda la mañana.
En este sentido, la acusación popular argumentó que con los testimonios de hoy “se ha ratificado totalmente la versión de la menor”. “Los hechos son como ella ha contado, ha aparecido una cuarta persona y ella la explicación que da es que no había hecho nada y por tanto no la había mencionado porque no había intervenido en los hechos”, relató.
Así, mantuvo que “son los testimonios de todos a los que se lo ha ido contando la menor y coinciden en lo esencial en todo el tiempo que ha pasado desde que ocurrieran los hechos no ha habido ningún resquicio en su declaración y todo tiene una explicación lógica”.
Defensa
Los abogados de la defensa sostuvieron que “ha habido declaraciones muy contradictorias hasta el momento que pueden poner en entredicho la veracidad de la versión de la niña de los hechos que hayan podido o no ocurrir el día 24 de noviembre”. Olga del Cura, abogada defensora del astorgano ‘Lucho’, y Olga Navarro, letrada del despacho de Rafael Uriarte, cuyo cliente es el berciano ‘Viti’, señalaron que “se está a la espera de la práctica de más pruebas para ver si lo que ha comentado que ocurrió el 24 de noviembre es cierto o no”.
“Hemos pedido pruebas testificales, muchas pruebas que estamos solicitando y que son determinantes para demostrar la inocencia o culpabilidad de los investigados”, indicaron. “Todavía falta mucha prueba por practicar como para que se pueda decir nada. No se puede decir nada de opiniones como está diciendo las acusaciones. Hay mucha prueba por practicar, audios que ver. Ahora mismo lo mejor es respetar la presunción de inocencia, como hemos pedido ya en otras ocasiones”, relataron.
El tercer letrado de la defensa, José Luis Álvarez, abogado de Raúl del Cura, señaló que “lo que han hecho los testigos es apoyar la versión de la menor con matices, contradicciones y algunas lagunas pero han ratificado su versión”. Además, matizó que “la discrepancia es que la niña estuvo haciendo vida normal desde que ocurrieron los hechos hasta que se presentó la denuncia y que cuando comenzó a tener problemas de ansiedad ha sido con posterioridad, a partir de mediados de denuncia”.
“Una vez presentada la denuncia y a lo mejor superada por los acontecimientos es cuando dicen que tiene problemas pero antes acudió al colegio, realizó exámenes, incluso, acudió al campo de fútbol en el puente de la Constitución sin ningún temor a encontrarse con los chicos ni a que tuviese algún tipo de encontronazo con ellos o la pudieran coaccionar o cualquier cosa”, contó a los periodistas. “A mí no me parece normal pero a nadie se le puede prohibir que haga vida normal; lo que no sé es si esto es compatible con los hechos que narra”, concluyó.
Respecto al cuarto jugador de la Arandina que aparece en el vídeo grabado por la menor, y que fue aportado como prueba por una de sus amigas menores el pasado martes, 2 de enero, comparecerá ante la juez para prestar declaración de forma voluntaria aunque aún no se ha fijado la fecha.