Los Jiménez preparan un nuevo récord para el 2020, que mostrarán durante las fiestas de Astorga

El patriarca de la familia, Luis, y su hijo, Emilio, explican las claves para conseguir acumular seis récords mundiales y 23 años de impactantes exhibiciones
Emilio y Luis Jiménez haciendo una demostración en la Eragudina de Astorga. SG

Los forzudos miembros de la familia Jiménez no descansan y para el 2020 ya están preparando un nuevo número con el que sorprenderán a todos. Un nuevo récord mundial con el que celebrarán su 23 aniversario participando en las fiestas patronales de la ciudad. Hasta la fecha, Luis, Emilio y Sandra ostentan “seis récords mundiales, números únicos que nadie realiza como nosotros”, explicó Emilio Jiménez.

A Luis Jiménez, el patriarca de la familia, todas las partes de su cuerpo le valen para desafiar a la física. Con el cuello mueve 30 toneladas y un autobús con 14.500 kg más el peso de 81 personas en su interior; con la perilla, 3.500 kg; con los dientes, 10 toneladas y con el pene, 1.500 kilos. El sexto récord lo tiene su hija Sandra, quien mueve con su cuello un camión de 10 toneladas. Por otra parte, su hijo Emilio resiste el impacto de una piedra de más 240 kilos sobre el estómago. Muchos astorganos ya han visto las hazañas de esta familia dedicada en cuerpo y alma a sobrepasar sus propios límites, pero fuera de la ciudad también son ampliamente reconocidos.

 

 

Los Jiménez han realizado exhibiciones por toda España pero además han participado en numerosos programas de televisión como ‘El Hormiguero’, ‘Noche de impacto’, ‘Parece mentira’; ‘Tú si que vales’, ‘Got talent’, el ‘programa de Ana Rosa’ y otros muchos. Su autocontrol y dominio del dolor han sobrecogido siempre a los espectadores, que, como si de magia se tratase, nunca terminan de entender como tales proezas son posibles. Todos estos números han sido realizados sin que ninguno de los Jiménez haya sufrido ninguna secuela física grave. Aún así, la peligrosidad de los mismos es evidente. Por ejemplo, ‘Antena 3’ les hizo firmar unos contratos en los que la cadena se eximía de los riesgos que corrían  al realizar varias de sus demostraciones. 

 

 

Sin embargo, detrás de estas exhibiciones de fuerza y talento, lo que hay es una vida saludable, esfuerzo y entrenamiento constante. Él de Luis Jiménez comenzó en los años 70. Mientras practicaba fisioculturismo, conoció a un maestro de Kung Fu Wushu, que le introdujo en este arte marcial tradicional de China. Tras ocho años de entrenamientos, consiguió convertirse en cinturón negro de primer grado y empezó a impartir clases en Astorga. En las décadas posteriores dio clases en diferentes localidades de toda la provincia como el Club Kyoto en León y el gimnasio Santa Mónica de Bembibre, pasando también por La Silba, Montealegre, La Silva, Almazcara o Brañuelas. En Astorga, además de impartir esta disciplina marcial, Luis ha sido operario de la grúa municipal hasta su reciente jubilación.

El patriarca de la familia siempre ha estado muy unido a sus hijos y desde pequeños Emilio y Sandra siguieron los pasos de su padre. Emilio empezó a desenvolverse con el Kung Fu Wushu a los ocho años y Sandra a los seis. Además, los nietos de Luis, Cristián y Desiré, son en la actualidad cinturón azul.

 

Luis Jiménez en sus inicios con las artes marciales

 

La familia ha impartido clases de defensa personal a la Policía Militar en el Acuartelamiento Santocildes, a la Policía Local, a alumnos de diversos colegios de la ciudad y a nivel particular. Los Jiménez han ganado diversos campeonatos deportivos. Luis se proclamó campeón de España de Boxeo chino en el 1987 y Emilio consiguió quedar primero en lucha cuerpo a cuerpo con bastón o bo y tercero en mano vacía, ambas a nivel nacional. Asimismo varios de sus alumnos han vencido en diversas competiciones en el ámbito de interclub, autonómico y nacional. Por otro lado, Luis Jiménez es desde hace unos meses presidente de la Federación castellano leonesa de los ‘Strongest Men’, los hombres más fuertes de España.

Esta extensa y trepidante carrera de triunfos y récords mundiales desembocó hace 22 años en un espacio abierto al público cuando los Jiménez decidieron compartir sus habilidades con el público, creando un espectáculo de fuerza, que ya es un habitual de las fiestas de Santa Marta de Astorga. No obstante, el patriarca de la familia ya llevaba otros veinte años ofreciendo exhibiciones con su maestro.

 

 

Pero esta familia tiene varias facetas, las más desconocidas su solidaridad y amor al flamenco. Desde que el patriarca era joven, la familia ha colaborado siempre con diferentes causas sociales como la lucha contra el cáncer y con las personas con Síndrome de Down o Alzheimer, además de con las víctimas de catástrofes naturales, entre otras. Luis Jiménez ya venía realizando este tipo de colaboraciones desde joven, pero además dedicó una parte de su vida, antes de iniciarse en el deporte, a realizar actuaciones de flamenco por toda España y otras partes del mundo. Y es que este hombre, considerado por muchos el hombre más fuerte de España, tiene un corazón humilde y considera que todo lo logrado  “ha sido un regalo de Dios”. Sin duda, su empeño y voluntad también habrán contribuido y seguro que seguirán haciéndolo, porque a pesar de sus cerca de 70 años, es incansable.

 

 

 

 

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