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La alcaldesa en funciones, Mar Castro, ha resuelto con fecha 12 de septiembre aprobar la lista de aspirantes admitidos para la provisión de una plaza de Técnico en el Consistorio Astorgano. Llama poderosamente la atención la presencia del exconcejal Javier Rodera Fuente, con todo en regla para pretendiente de la ansiada plaza de funcionario, como también a priori el ahora concejal comunista, José María Jáñez. Sorprende que siendo parte de la Corporación, habiendo gobernado en coalición con el Partido Socialista y ahora ayudando con los votos a favor de los asuntos presentados por el equipo de Juan José Alonso Perandones, no se tenga en cuenta que está imputado en un turbulento accidente de tráfico, con huída, tasa de alcoholemia superior a la permitida y diversas actuaciones que afean toda esta aspiración.
Veinte son los aspirantes admitidos para la plaza, la sombra de la “amoralidad” de ser parte de la Corporación y querer ser funcionario de la institución local crece por momentos. Normalmente, existen numerosos antecedentes en que los políticos abandonan sus cargos para ocupar puestos en la función pública. Pero ¿qué se puede esperar del adalid de las buenas formas y la anticorrupción política? Al menos en la legislatura anterior en la oposición.
Consejos doy que para mi no tengo, La izquierda comunista es lo más corrupto que puede existir. Todo un ejemplo de transparencia e igualdad. Lo siento por el resto de aspirantes.
si cumple con las bases y no se le inhabilita para empleo público no veo por qué el sr. franco no va a poder presentarse y luchar en buena lid por la plaza. Pero claro, esta última premisa estamos hablando de un país serio, no de los regímenes cutres comunistas bolivarianos ensoñados por este tipo de políticos, en los que la meritocracia brilla por su ausencia. Le deseo suerte al sr. franco, exactamente la misma que a los otros 19 candidatos. Confiemos en que la plaza se obtenga de un modo justo y no por métodos caciquiles tan de moda en estos últimos tres años, aunque dados los tiempos que corren más que confianza es un ejercicio de fe.