IU Provincial pide a la Fiscalía que esclarezca si hay un delito contra la salud pública en el caso del compost del CTR

Todas las asambleas de Izquierda Unida de la provincia de León, a iniciativa de IU-Astorga, presentarán mañana ante la Audiencia Provincial la denuncia para esclarecer los hechos sobre la supuesta contaminación del compost del CTR. Desde IU han manifestado que el alcalde Villaobispo de Otero, Joaquín Llamas, planteó en su día la denuncia ante el Seprona pero no ante el juzgado, por lo que ellos han decidido tomar cartas legales en el asunto.

El coordinador provincial, Santiago Ordóñez, ha explicado que el alcalde de Villaobispo jamás planteó estos hechos ante la Asamblea General de Gersul, pero que el informe que encargó su consistorio determinó que el compost tenía una serie de impurezas que no cumplen la legislación vigente. “De no cumplirse la legislación, podemos estar ante un delito de salud pública ya que se ha repartido a los agricultores a sabiendas de que no cumplía los estándares establecidos”, apunta.

Izquierda Unida ha recopilado todos los datos que existen hasta el momento y ha manifestado que la Guardia Civil visitó el CTR y emitió un informe, al que no han tenido acceso, pero que la Comandancia remitió a la Junta de Castilla y León. “Queremos que se revise desde el punto de vista legal por si hay delitos en toda la gestión del CTR y se depuren las responsabilidades tanto políticas, de la Asamblea de Gersul, como técnicas, de la UTE que lo gestiona”.

Ahora será la Fiscalía la que, en un plazo de seis meses, estudie todos los hechos y dirima las responsabilidades. “No queremos encarcelar a nadie, pero sí queremos que se esclarezcan los hechos por el bien de los agricultores y para tranquilizar a toda la provincia”, concluye el coordinador provincial de IU.

Desde la formación también han denunciado que el verano pasado ya se preguntó en las Cortes de Castilla y León sobre el grado de cumplimiento de la normativa del CTR, pregunta que no ha sido todavía respondida por el consejero Antonio Silván.

Además de Izquierda Unida, el PAL provincial ya anunció el pasado 28 de febrero que retomará también la demanda retirada por el Ayuntamiento de Villaobispo. El portavoz del PAL en el Consistorio de Astorga, Pablo Peyuca, en el pasado pleno de febrero planteó al equipo de gobierno astorgano si pretendía encabezar algún tipo de iniciativa para pedir responsabilidades políticas por el compost y la supuesta contaminación de los campos, algo que la alcaldesa manifestó tener que estudiar.

El secretario de organización del PAL, Francisco Gómez, explicó que ellos llevarían la demanda a los juzgados de instrucción en base a los informes de un laboratorio independiente que apuntaba que el 41% de los residuos del compost estaban contaminados. “No vamos a permitir que esta demanda quede en el olvido ya que entendemos que estamos ante un supuesto delito y vamos a intentar seguir y agotar la vía judicial”, explicaba Gómez.

La presidenta de la Diputación de León, Isabel Carrasco, lamentó el viernes que se haya “abierto la veda” contra el compost ya que los agricultores ahora tendrán que comprar los fertilizantes mientras que el compost se les suministraba completamente gratis. “Cuando estás haciendo algo gratis y lo estás haciendo bien es una pena tener que dejar de hacerlo, pero si te crea un problema hay que solucionarlo”, explicaba Carrasco.

La voz de alarma del alcalde de Villaobispo de Otero, Joaquín Llamas, fue la espoleta para que alcaldes, concejales y pedáneos de varias formaciones políticas en comarcas enteras como La Cepeda, el Órbigo, Maragatería y Sequeda comenzaran a impulsar iniciativas en sus respectivos municipios para exigir a Gersul y la Junta de Castilla y León, “meridiana claridad” sobre la realidad de los residuos.

Concretamente, los impulsores de las iniciativas se enmarcaban en la Mancomunidad de La Cepeda (ayuntamientos de Magaz de Cepeda, Quintana del Castillo, Villagatón, Villamejil y Villaobispo), así como los de Valderrey, Hospital de Órbigo, Carrizo, Santa Marina del Rey, Villarejo, Villares, Benavides, Turcia, Cimanes del Tejar, Val de San Lorenzo, Brazuelo, Santiago Millas y Santa Colomba de Somoza.

Pero estos apoyos parecieron esfumarse cuando el Ayuntamiento de Villaobispo decidió retirar la denuncia, un parón en la investigación del Seprona que se debía a la firma de un decreto por parte de la presidenta de la Diputación retirando la dedicación exclusiva al alcalde Joaquín Llamas. La retirada de la denuncia, provocó que Carrasco volviera a reponer esta dedicación, lo que ha provocado múltiples reacciones fuera y dentro del Partido Socialista al que pertenece el edil.

Ante este panorama, el Partido Socialista de Astorga emitió un comunicado en que el manifestaba que, de ser verdad que Llamas aceptó retirar la denuncia a cambio de continuar con la dedicación que tenía asignada, había existido un comportamiento improcedente. El PSOE de Astorga indicó que esta actitud era “totalmente reprobable e impropia de un diputado provincial” y se ha exigido al edil de Villaobispo de Otero que informe, con prontitud y veracidad, sobre su comportamiento en este asunto a la opinión pública y a todos los ciudadanos de este Partido Judicial.

Hace tan sólo unos días, más de 150 militantes socialistas de diferentes agrupaciones de la provincia reclamaban que “a la mayor urgencia y publicidad posible” Llamas diera una explicación detallada y un desmentido convincente sobre la retirada de esta denuncia. Los militantes manifestaron “su rechazo a participar en este silencio que pudiera entenderse cómplice con la citada situación, y que sólo contribuye a desprestigiar la labor de otros muchos cargos públicos socialistas de la provincia de León”.

El informe

En el mes de noviembre salía a la luz un informe analítico realizado por un laboratorio independiente del supuesto compost o abono orgánico procedente del Centro del Tratamiento de Residuos (CTR) provincial de San Román de la Vega. Este documento determinó de manera fehaciente que ese compost presentaba impurezas y materiales inertes en un 41% de su composición, siendo estas impurezas restos potencialmente contaminantes.

El propio Ayuntamiento de Villaobispo de Otero fue el que dio la voz de alarma y encargó este análisis pormenorizado después de comprobar sobre el terreno que el hipotético abono depositado por el consorcio provincial de residuos presentaba de manera muy evidente materiales apenas biodegradables.

El informe confirmó la existencia masiva en las muestras estudiadas de restos tales como plásticos, vidrio, metal, papel de aluminio, cepillos de dientes, tapones de botellas, bolígrafos, restos de tuberías de metal y diferentes materiales de uso médico, como émbolos, jeringuillas, goteros o envases de uso farmacéutico.