La Guardia Civil investiga a tres personas, de entre 38 y 44 años de edad, como presuntos autores de los delitos de falsedad documental, estafa, intrusismo profesional y contra el medio ambiente, tras falsear varias inspecciones en numerosas instalaciones frigoríficas de explotaciones ganaderas dedicadas a la producción de leche en la provincia de León.
La investigación se inició a principios de marzo de 2017, cuando el Equipo del Seprona de la Guardia Civil de León tuvo conocimiento de que una empresa frigorista ubicada en la provincia de León realizaba inspecciones y trámites para la inscripción de los tanques de frío en el registro de Industria, encargándose de gestionar a los ganaderos las solicitudes de inscripción de las instalaciones frigoríficas que poseen, expidiendo para ello certificados de instalación, en los que se acreditan presuntamente de manera falsa, datos, ensayos, pruebas, revisiones, marcados y documentación.
En las más de las 180 inspecciones realizadas por la Guardia Civil, en coordinación con el Servicio de Industria de la Junta de Castilla y León, se comprobó que ninguno de los equipos de frío de las explotaciones inspeccionadas había sido dado de alta en el registro habilitado al efecto, puesto que el Servicio de Industria detectó anomalías en la documentación presentada por la empresa en cuestión, la cual cobraba a sus clientes por los trámites realizados.
Realizadas gestiones con el Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Delegación Territorial de Junta de Castilla y León, en León, se comprobó que esta empresa no se encontraba dada de alta en el registro de productores y gestores de residuos de Castilla y León.
Una vez finalizadas todas las investigaciones, los agentes comprobaron que la manipulación los equipos con sistemas frigoríficos que contenían gases fluorados, no se habían llevado a cabo por personal con la certificación exigida, documento mediante el cual la administración reconoce a su titular la capacidad para desempeñar los trabajos en ellas designadas, debiendo formar parte de una empresa frigorista habilitada.
No obstante, las anomalías detectadas en los equipos no afectaban al grado de enfriamiento de la leche, y, por tanto, está garantizada la correcta conservación y la calidad de la leche almacenada. Las personas investigadas y las diligencias instruidas fueron puestas a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de los de León.